Suelo pélvico debilitado: síntomas y causas frecuentes

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En este artículo vamos a contarte qué es la debilidad del suelo pélvico o hipotonía, sus síntomas, causas más frecuentes y cómo se aborda.

El suelo pélvico es una estructura dinámica compuesta por vísceras, fascias, musculatura y su correspondiente inervación. Este desempeña un papel muy importante en la función y la estática de la pelvis. El suelo pélvico se contrae y se relaja de forma continua para favorecer la continencia, la micción y la evacuación. Además de participar en la función sexual y el parto.

La musculatura del suelo pélvico está mayormente compuesta por fibras de tipo tónicas, o sea, de sostén, son fibras que se activan de forma involuntaria en su mayoría.

Aunque también se pueden activar de manera voluntaria, existe gran dificultad para casi el 70 % de mujeres. Se asocia a la carencia de retroalimentación visual, a que en la corteza cerebral su representación es muy pequeña y al hecho sociocultural de ser una zona poco reconocida.

¿Qué problemas puede ocasionar la debilidad del suelo pélvico?

• Aumento de frecuencia urinaria y su urgencia.
• Pérdida de orina.
• Prolapso de órganos pélvicos.
• Incontinencia urinaria de esfuerzo.
• Incontinencia urinaria de urgencia.
• Algunas veces puede ocasionar dolor lumbar.

¿Cuáles son los factores de riesgo de las disfunciones de suelo pélvico?

Existen diferentes factores:

Predisponentes:

• El género.
• La genética.
• Medioambientales.

Desencadenantes:

• Partos.
• Daño nervioso, vascular o muscular.
• Radiación.
• Cirugía.

Perpetuadores, son los que mantienen la problemática:

• Estreñimiento.
• Alergias respiratorias.
• Bronquitis crónica.
• Ocio.
• Sedentarismo.
• Obesidad.
• Tabaquismo.
• El ciclo menstrual.
• Infecciones
• Menopausia
• Hiperpresiones en el abdomen, malos gestos deportivos, cantar, tocar algún instrumento de viento, por ejemplo.
• Mala postura.

¿Cómo puedo tratar la hipotonía del suelo pélvico?

En cualquier disfunción del SP detectar y modificar los factores perpetuadores es clave para mejorar los síntomas y evitar una recaída.

En fisioterapia utilizamos diferentes herramientas y métodos para mejorar la calidad de la musculatura del suelo pélvico. Lo primero que tenemos que lograr es reconocer esta área e identificar cómo puedo activar los músculos.

Podemos sentarnos sobre una fitball y colocar una toalla pequeña enrollada bajo el periné, y cuando activo el suelo pélvico, debo sentir que este se separa de la superficie de contacto.

Es importante prestar atención a la respiración, en lo ejercicios se inhala por la nariz, sin hinchar la barriga, y exhalamos por la boca con labios entreabiertos, simulando que subo una cremallera por mi abdomen a la vez que hago de cuenta que detengo la micción.

Aunque no presentes ningún síntoma, siempre se recomienda realizar una valoración con un especialista en suelo pélvico, y la prevención es fundamental.

En cabina, podemos utilizar:

• Ejercicios específicos de suelo pélvico.
• Biofeedback, con electroestimulación.
• INDIBA, radiofrecuencia para mejorar la calidad de los tejidos.
• Pilates terapéutico.
• Yoga.
• La ecografía nos puede ayudar a dirigir los ejercicios y ver si reclutamos bien las fibras del suelo pélvico.

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