Maria Bonanad

Desde que recuerdo he sentido curiosidad por la diversidad de formas que tenemos de ser, sentir y expresarnos, y por todo aquello que nos influye y hace ser quienes somos.

El mundo de las emociones y el sufrimiento de las personas me ha movido a acercarme y a tratar de ofrecer mi apoyo y presencia desde pequeña.

Esta vocación se convirtió con los años en interés por estudiar psicología y dedicarme a esta profesión.

Finalizando mis estudios en la facultad descubrí la teoría Gestalt, un abordaje psicoterapéutico que me ayudó a conocerme y comprenderme mejor, tanto a mí como a las personas que me rodean. Este enfoque me ofreció, además de una estructura teórica sólida, una manera de entender y acompañar a las personas llena de ternura, apertura, flexibilidad y entrega, que resultaba acorde con mi sensibilidad.

Ante mí apareció también la psicología perinatal, respondiendo a muchas preguntas que me había planteado sobre los procesos emocionales que se movilizan a nivel personal, de pareja y familiar con la búsqueda y llegada de un bebé. Descubrí la importancia de la prevención e intervención temprana, atendiendo las dificultades y necesidades que surgen en esta etapa.

Las experiencias que he tenido durante mi trayectoria profesional han reforzado la idea de que las condiciones y circunstancias personales tienen una gran influencia en la salud. Por ello, en mis acompañamientos terapéuticos incorporo una mirada interseccional.

Entre mis inquietudes está el realizar todas aquellas actividades que me permitan crecer profesional y personalmente y contribuir a crear un mundo más amable. Para ello realizo formación y supervisión de forma regular y trato de leer y escuchar voces que amplíen mi visión del mundo y me enseñen nuevas formas de entender la vida.

Actividad Profesional:
En el año 2007 comencé mi dedicación en el ámbito social. Durante aproximadamente diez años tuve la oportunidad y fortuna de trabajar como monitora y educadora con infancia con parálisis cerebral, ser acompañante de personas adultas con autismo, y voluntaria de ocio con personas con discapacidad intelectual combinada con enfermedad mental grave.

Tras terminar la especialización en psicología perinatal, realicé mis prácticas profesionales en una UCI neonatal y en una clínica ginecológica realizando preparación al parto para parejas.

Al acabar la carrera se abrió la posibilidad de acompañar a las personas desde el apoyo psicoterapéutico. Fui haciendo un cambio progresivo hasta 2016, fecha en la que comencé a dedicarme íntegramente a la atención psicológica. Durante un tiempo compatibilicé la intervención psicosocial en una ONG con la consulta privada, a la que me dedico exclusivamente en la actualidad.

Además de la atención individual y familiar, he coordinado grupos de mujeres, de personas migrantes y solicitantes de asilo, y de familias de personas con discapacidad.

Tras mi maternidad sentí el deseo de facilitar espacios para que las familias puedan compartir sus experiencias, por lo que en la actualidad organizo grupos de crianza y talleres dirigidos a familias que esperan un bebé de cara al final del embarazo, parto y posparto.

He realizado acciones formativas para personal de la administración municipal sobre aspectos psicológicos en la atención a personas y participado como docente en formaciones para Voluntariado en distintas entidades sociales.