La fascitis plantar es una afección frecuente que afecta a la planta del pie, concretamente a la banda de tejido conjuntivo conocida como fascia plantar, que se extiende desde el talón hasta los dedos y sostiene el arco del pie. Cuando la fascia plantar se funde o se inflama como consecuencia de un esfuerzo excesivo o una tensión repetitiva, la afección se conoce como fascitis plantar.
Esta afección es más frecuente en adultos, sobre todo entre los 40 y los 60 años, aunque puede afectar a personas de todas las edades y a alrededor del 20% de los corredores, y se observa con mayor frecuencia en personas físicamente activas o con un trabajo que requiera periodos prolongados de pie.
Los corredores, los atletas y las personas con sobrepeso también tienen un mayor riesgo de desarrollar fascitis plantar.
Los síntomas típicos de la fascitis plantar son un dolor agudo o punzante en el talón o el arco del pie, sobre todo al dar los primeros pasos por la mañana o tras periodos prolongados de reposo. Con el movimiento, el dolor puede remitir, pero puede reaparecer tras una actividad extenuante o al final del día.
Cuando los tratamientos conservadores fracasan en alrededor del 15% de nuestros pacientes (plantillas, fisioterapia, infiltraciones), se hace necesaria la cirugía.
Otras causas de la fascitis plantar son:
Si sufres de fascitis plantar existe una opción de vanguardia para el tratamiento de la fascitis plantar: la cirugía ecoguiada de Neuroma de Morton.
La cirugía combina la ecografía de alta resolución con técnicas quirúrgicas ultra mínimamente invasivas, permitiendo una visualización en tiempo real de las estructuras afectadas en el pie. Esto significa que nuestros especialistas pueden identificar con precisión el área inflamada y realizar el procedimiento con una mayor exactitud, minimizando el riesgo de dañar tejidos sanos circundantes.
Se hace con anestesia local y con la guía continua de un ecógrafo de alta resolución se hace una punción con una aguja casi inapreciable para el paciente, es como una infiltración pero con una duración aproximada de unos 20 o 25 minutos, donde se trata la fascia plantar o bien alargando sus fibras en el caso de que la causa de la enfermedad sea un acortamiento o destruyendo dichas fibras, en el caso de excesiva rigidez y se hace siempre con precisión milimétrica. Si tienes alguna duda puedes consultar nuestra guía completa de causas, síntomas y tratamientos de la fascitis plantar.
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