La enuresis en la infancia y adolescencia es un tema que requiere atención y comprensión. En España, según el artículo, Rodríguez Fernández, L., & Manzano, S. (n.d.). “Diagnóstico y tratamiento de la enuresis nocturna.” publicado por la Asociación Española de Pediatría, la prevalencia de la enuresis guarda una relación directa con los criterios diagnósticos utilizados, pero podemos decir que este trastorno afecta en nuestro medio al 10- 13% de los niños de 6 años y al 6-8% de los de 10 años… En España se estima que existen más de 500.000 sujetos con enuresis nocturna.
La enuresis nocturna tiene una prevalencia 1,5 a 2 veces mayor en los varones que en las mujeres y sucede así en todas las edades hasta la pubertad, aunque esta desigualdad tiende a disminuir a partir de los 8-10 años.
Esta condición, a menudo subestimada, puede tener un impacto significativo en la calidad de vida de los menores y sus familias, lo que denota la importancia de llevar a cabo un abordaje sobre la situación de forma integral tanto a nivel individual como a nivel familiar, incluso escolar si fuera necesario.
La enuresis se define como la emisión repetida de orina durante el día o la noche en niños mayores de cinco años, cuando se espera que hayan desarrollado control vesical. Es fundamental comprender que la enuresis no es un comportamiento voluntario ni un signo de negligencia. Más bien, es una afección médica que puede estar relacionada con diversos factores, incluidos aspectos psicológicos. Esta condición puede tener un impacto significativo en la calidad de vida de los niños y adolescentes, afectando no solo su bienestar físico, sino también su salud mental y emocional.
Desde la perspectiva psicológica, la enuresis puede entenderse como una respuesta psicofisiológica ante una desregulación emocional. Factores como estrés, ansiedad o problemas emocionales o familiares pueden contribuir al desarrollo o la persistencia de la enuresis en niños y adolescentes como forma de expresar o gestionar dichas situaciones/emociones. Es esencial abordar esta problemática teniendo en cuenta tanto los aspectos físicos como los factores psicológicos subyacentes.
Efectivamente, existen dos tipos principales de enuresis:
La enuresis diurna implica episodios de pérdida involuntaria de orina durante las horas del día, mientras que la enuresis nocturna se refiere a episodios durante la noche, comúnmente conocida como “mojar la cama”. Comprender la distinción entre estos tipos es esencial para personalizar la intervención y el apoyo.
Las causas de la enuresis infantil pueden ser diversas y multifactoriales y pueden variar desde factores genéticos, problemas médicos como infecciones del tracto urinario, hasta cuestiones psicológicas. Problemas como ansiedad, cambios significativos en su entorno, conflictos familiares o cualquier otro cambio a nivel emocional desempeñan un papel crucial en el desarrollo de la enuresis. Es crucial que los profesionales de la psicología aborden estas posibles causas para diseñar un enfoque terapéutico integral.
En conclusión, abordar la enuresis en la infancia y adolescencia requiere un enfoque integral que combine tanto la comprensión de los aspectos fisiológicos como la consideración de los factores psicológicos subyacentes. Al adoptar una perspectiva psicológica, podemos ofrecer un apoyo más efectivo, ayudando a los niños y adolescentes a superar este desafío y promoviendo su bienestar integral. La empatía, la paciencia y la colaboración entre padres, educadores y profesionales de la salud son fundamentales en el camino hacia la superación de la enuresis en la juventud.
La publicación del presente artículo en el Sitio Web de Doctoralia se hace bajo autorización expresa por parte del autor. Todos los contenidos del sitio web se encuentran debidamente protegidos por la normativa de propiedad intelectual e industrial.
El Sitio Web de Doctoralia Internet S.L. no contiene consejos médicos. El contenido de esta página y de los textos, gráficos, imágenes y otro material han sido creados únicamente con propósitos informativos, y no para sustituir consejos, diagnósticos o tratamientos médicos. Ante cualquier duda con respecto a un problema médico consulta con un especialista.