El melanoma es un tipo de cáncer de piel que cada vez es más frecuente y que puede ser agresivo si no se detecta y trata a tiempo. Por suerte, hay varias cosas que se pueden hacer para identificar posibles señales de melanoma y detectarlo en estadios tempranos.
Una de las maneras más fáciles de recordar cómo buscar señales de este tipo de tumor es el “ABCD” del melanoma. Estas son las siglas para cuatro características principales que los dermatólogos utilizamos cuando evaluamos lesiones pigmentadas en la piel.
A continuación, desglosaremos cada letra del “ABCD” y explicaremos lo que significa:
A: Asimetría
La asimetría se refiere a la forma de la mancha o lesión. Si la mancha o lesión no es simétrica, es decir, si una mitad de la mancha parece diferente de la otra mitad, puede ser una señal de melanoma. Por ejemplo, si trazas una línea imaginaria por el centro de una mancha y cada mitad parece diferente, eso es un signo de asimetría.
B: Bordes
Si los bordes de la lesión son irregulares, borrosos o desiguales, podría ser una señal de melanoma. Las manchas o lesiones benignas (no cancerosas) suelen tener bordes suaves y uniformes por lo que los bordes irregulares pueden ser una señal de alarma.
C: Color
Si la mancha o lesión tiene más de un color, especialmente si los colores son oscuros o muy diferentes entre sí, puede ser una señal de melanoma. Las manchas o lesiones benignas suelen ser uniformes en color, por lo que los cambios de color pueden ser una señal de alarma.
D: Diámetro
El diámetro se refiere al tamaño de la mancha o lesión. Si la mancha o lesión es mayor de 6 mm, eso podría ser una señal de melanoma. Las manchas o lesiones benignas suelen ser más pequeñas.
Además del “ABCD” del melanoma, hay algunas otras señales de alarma que puedes buscar, como:
E: Evolución
Si la mancha o lesión crece, cambia de forma o color, o comienza a sangrar puede ser una señal de malignidad y deberías consultar a un médico especialista en dermatología.
Por todo lo comentado anteriormente es muy importante que ante cualquier cambio en un lunar o aparición de lesiones pigmentadas nuevas siempre consultemos al especialista en el cuidado de la piel que es el dermatólogo. Y por supuesto, siempre que haya exposición utilizar un buen fotoprotector y evitar exponerse al sol durante las horas centrales del día que son las de mayor índice de radiación UV. El melanoma es un tumor que tiene mucha influencia de la radiación solar, por lo que si queremos prevenirlo lo más adecuado es protegernos del sol. Puedes seguir informándote en nuestra guía sobre el cáncer de piel y su impacto en la salud.
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