¿Qué es el síndrome de Asperger? Síntomas y grados de este trastorno del espectro autista

El síndrome de Asperger es un trastorno del neurodesarrollo que se incluye dentro del espectro autista afectando principalmente a la interacción y comunicación con las otras personas.

Las personas que lo padecen además presentan inflexibilidad cognitiva, resistencia ante los cambios y poseen intereses muy restringidos y particulares.

En España este trastorno del neurodesarrollo afecta entre 3 y 5 personas por cada 1000 nacidos vivos según datos de Confederación Asperger España. (Datos recogidos en febrero de 2023).

Aunque se desconoce el origen de este síndrome si que los datos apuntan a una causa biológica y genética interviniendo también factores ambientales en su desarrollo.

Las diferencias entre TEA y Asperger

Aunque el síndrome de Asperger se considera dentro del espectro autista debemos saber que existen diferencias bastante significativas entre las personas con autismo y las personas con Asperger.

Una persona con autismo presenta retraso en el habla mientras que una persona con Asperger sin embargo no tiene retraso en el desarrollo del lenguaje, incluso su lenguaje suele ser como el resto de los niños o más elaborado con un alto nivel gramatical.

Además mientras los TEA no muestran interés en tener relaciones sociales, los asperger sí que quieren relacionarse aunque suelen buscar personas que compartan con ellos sus intereses específicos.

Otra característica que los diferencia es que los autistas suelen presentar comportamientos estereotipados y repetitivos mientras que los Asperger son dados a tener intereses muy particulares y específicos en ciertas áreas como hemos comentado anteriormente.

Como dato importante señalamos que el Asperger posee un funcionamiento intelectual dentro del promedio normal y un comportamiento adaptativo mientras que las personas con autismo presentan un coeficiente intelectual que puede variar desde discapacidad intelectual hasta alta capacidad aunque generalmente es bajo. Además presentan en la mayoría de ocasiones un comportamiento adaptativo.

En resumen podríamos afirmar que el síndrome de Asperger se considera una forma más leve de autismo en la que la comunicación está alterada ya que aparentemente se puede comunicar con un uso funcional y correcto del lenguaje pero presentan dificultades en la comprensión del lenguaje no verbal, las emociones y en la comprensión del uso social del lenguaje.

El síndrome de asperger equivale al nivel 1 de los TEA , también llamado autismo de alto funcionamiento. Y aunque el término ha desaparecido a nivel clínico se sigue utilizando a nivel coloquial.

Factores de riesgo (o causas que predisponen a padecerlo)

No existe una causa única o concreta . Aquí presentamos algunas de las causas que podrían predisponer a padecerlo.

Factores genéticos

Ya se han identificado más de 100 genes de riesgo de autismo, sin embargo en la mayoría de los casos no hay una sola mutación sino una combinación compleja y variable de riesgo genético y de factores ambientales que influyen en el desarrollo temprano del cerebro

Tener uno o más familiares con TEA: el riesgo de tener otro hijo con TEA es en torno al 20% y este riesgo aumenta hasta un 50% si ya hay más de un hermano afectado por TEA.

El factor de riesgo más importante para el TEA es tener un familiar que lo padezca.

Factores ambientales

• Edad avanzada de los padres.
• Enfermedades durante el embarazo.
• Prematuridad extrema.
• Dificultades en el parto, con falta de oxígeno al nacer.
• Tratamientos de epilepsia durante el embarazo.
• Exposiciones a pesticidas en el embarazo.

Todos estos factores por sí solos no causan autismo, sino que en combinación con factores genéticos podrían aumentar la probabilidad de riesgo.

No existe evidencia acerca de las causas del autismo de una forma total pero sí se sabe que el autismo no viene causado por una mala crianza por lo que en la actualidad se entiende el autismo como un trastorno cuyo origen es biológico.

Sintomatología

• Incapacidad en lo social, conductual y comunicacional.
• Limitada gama de intereses.
• Le cuesta manejar las relaciones con otras personas. Patrones de pensamiento inflexibles.
• A veces presentan torpeza motora.
• Tienen dificultades cuando aparecen cambios, se pueden alterar.
• Baja tolerancia a la frustración.
• A menudo no interpretan bien el lenguaje no verbal. Literalidad en la expresión y comprensión.
• Sensibilidad a sonidos, colores, luces, olores y sabores fuertes.
• Pueden ser expertos en un tema.

Estos son algunos rasgos pero también pueden presentar problemas para comprender cosas que han escuchado, tener una memoria inusual para ciertos detalles, hablar de un modo muy elaborado o simplemente dar la sensación de ser personas muy particulares, excéntricas o distintas. La sintomatología puede variar aunque los rasgos principales son los que hemos citado al comienzo de este artículo.

Consejos para ayudar a las personas que lo padecen

Podemos hacer mucho por ayudar a estas personas:

Psicoeducación

Sobre todo si tenéis un hijo con SA lo importante es una buena psicoeducación acerca de las características e implicaciones del síndrome para poder ayudarlo en todas las facetas de su vida.

Comprensión y escucha

Es importante que se sienta comprendido y apoyado a todos los niveles. A nivel emocional, a nivel intelectual y por supuesto a nivel social. Mantén siempre una actitud de escucha y valida sus emociones. Lo que se está diciendo es verdad, lo siente tal y como lo expresa. Si no sabes ayudarle consulta con un profesional de la salud mental.

Empatiza y muestra interés

Procura comprenderlo, aunque sus intereses sean distintos a lo convencional, interésate por conocer sus gustos, por sus intereses porque son super importantes para ellos.

Potencia sus intereses particulares

Intenta alimentar sus intereses particulares, ya que fomentarás el desarrollo de una buena autoestima. Busca actividades en las que pueda desarrollarlos y divertirse.

Promueve interacciones sociales

Promueve la interacción social con personas con las que se sienta bien, con personas que tengan intereses similares y no le juzgues por que le gusten cosas diferentes a personas neurotípicas.

Es tarea de todos entender y apoyar a las personas con asperger ya que son más vulnerables a ser rechazadas, ignoradas y por tanto más proclives a padecer trastornos tales como la ansiedad y la depresión.

Si observas que la persona con síndrome de asperger tiene algún malestar emocional consulta siempre con un psicólogo.

Tenemos que tener en cuenta que una buena atención precoz, un buen ambiente familiar y educativo unido a una alta capacidad intelectual y de aprendizaje pueden ayudar mucho a un mejor ajuste social y emocional en estas personas.

Psicólogos | Psicólogos Barcelona | Psicólogos Madrid | Psicólogos Sevilla | Psicólogos Valencia | Psicólogos Zaragoza