La definición de probiótico, según el Ministerio de Sanidad, se trata de un microorganismo vivo que administrado en cantidades adecuadas, es capaz de ejercer funciones beneficiosas para el organismo.
En concreto, los probióticos vaginales, son una serie de microorganismos que realizan funciones beneficiosas para la salud vaginal, nos ayudan al buen funcionamiento del aparato genital femenino, encargados de la reproducción y el embarazo.
La mayoría de bacterias que predominan son lactobacilus.
Los probióticos vaginales se encargan de mantener en equilibrio la flora vaginal, repoblándola y reparando el entorno microbiano intestinal-vaginal y también de la vejiga, para que no existan desequilibrios o disbiosis que puedan provocar infecciones y otros problemas de salud.
Muchos estudios demuestran que el uso de probióticos vaginales son altamente eficaces para la prevención y el tratamiento de infecciones urogenitales; vaginitis por candida bacteriana, candidiasis vulvovaginal, cistitis recurrentes.
Los probióticos vaginales, por lo tanto, van a formar parte de nuestra protección y defensa.
El consumo de probióticos y una buena alimentación, está estrechamente relacionado con una calidad de la microbiota, mejorando su integridad y repercutirá en el mantenimiento de la flora vaginal.
También es importante:
Todas estas medidas, nos van ayudar a mejorar nuestra salud y disminuirán el riesgo de padecer infecciones. No dudes en consultar nuestra guía completa sobre probióticos: beneficios, usos y recomendaciones para una salud digestiva óptima y resolver así todas tus dudas.
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