Dolor de rodillas: diagnóstico y posibles tratamientos

La rodilla es una articulación muy compleja y que se utiliza mucho en el día a día. Esta articulación soporta mucho peso y requiere de mucha fuerza mecánica para poder andar, correr e incluso saltar. Tiene la peculiaridad de que tiene dos almohadillas entre los huesos, que son los meniscos, muy importantes para amortiguar las cargas, pero que con el paso del tiempo y el sobreuso se pueden lesionar fácilmente. En cuanto a la anatomía de la rodilla, también es especial el hueso móvil en la parte anterior (la rótula), que hace que el cuádriceps pueda realizar mucha más fuerza

Por toda esta complejidad de la anatomía de la rodilla, el dolor de rodillas es un síntoma frecuente y bastante común tanto en jóvenes como en adultos. Muchas veces este dolor proviene sin haber tenido ningún golpe ni traumatismo previo y puede ir desde una molestia ligera a llegar a ser muy molesto e incapacitante. Así que, ¿qué está produciendo este dolor en las rodillas?

Causas del dolor de rodillas

Las causas más frecuentes del dolor en esta articulación suelen ser:

• El sobreuso de la articulación (que a su vez puede estar causado por sobrepeso o por un uso excesivo de las rodillas),
• Contusión o golpe en las rodillas.
• Movimiento brusco. Por ejemplo, la causa típica de lesión de menisco ocurre por un giro brusco del cuerpo mientras la pierna está fija en el suelo.
• Por alguna patología de base (por ejemplo una artritis reumatoide).
• Alineación incorrecta de las piernas y mal apoyo al caminar, esto provoca a su vez un uso excesivo de la articulación.

Posibles diagnósticos de dolor de rodillas

Según la estructura que se encuentre afectada, se podrá estar hablando de una lesión u otra.

• En caso de tener algún tendón cercano a la rodilla inflamado se hablará de tendinitis. En el caso de la rodilla es muy típico la tendinitis de la pata de ganso (inflamación de los tendones del músculo sartorio, grácil y semitendinoso).
• En el caso de tener algún músculo o tendón roto o parcialmente se estaría hablando de rotura fibrilar o rotura de algún tendón cercano a la rodilla.
• Si se trata de una inflamación de la rodilla en general, puede tratarse de una bursitis (inflamación de la bolsa articular).
• También puede ser que algún ligamento se estire de más o llegue a romperse, y se hablaría de un esguince.

Lesiones de rodilla

Además de estas lesiones que pueden ocurrir en cualquier articulación, la rodilla tiene lesiones muy particulares y que también son frecuentes. Las más importantes son:

• Condromalacia rotuliana: es el desgaste del cartílago de la parte posterior de la rótula.
• Quiste de baker: se trata de un quiste lleno de líquido que se encuentra en la parte posterior de la rodilla y duele al realizar alguna actividad o al flexionar la rodilla.
• Síndrome femoropatelar: se trata de un dolor difuso alrededor de la rótula que empeora al flexionar la rodilla.
• Meniscopatía: en este apartado englobamos el desgaste de los meniscos de la rodilla y la rotura de estos.
• Gonartrosis: desgaste y degeneramiento de la articulación en general, es artrosis localizada en la rodilla.

Tratamientos posibles para el dolor de rodilla

Depende de qué lesión sea, pero generalmente debería de ser:

Fisioterapia: irá encaminada a aliviar el dolor y también en aumentar la masa y fuerza muscular de los músculos cercanos a la rodilla (en especial el cuádriceps) para evitar futuras recaídas. Algunas de las técnicas usadas en fisioterapia son:

• Realización de ejercicios terapéuticos.
• Termoterapia y crioterapia.
• Estiramientos.
• Vendajes.
• Masoterapia.
• Terapia manual.
• Electroterapia.

Tratamiento farmacológico: en caso de que el dolor sea muy persistente y durante el mínimo tiempo posible.

Infiltraciones: realizadas por un médico especialista en caso de que ni la fisioterapia ni los medicamentos funcionen.

Cirugía: como último recurso cuando todo lo anterior ha fracasado.

Consejos para prevenir el dolor de rodillas

Tener hábitos de vida saludables es crucial para prevenir cualquier lesión, pero en el caso de las rodillas especialmente. Los puntos clave para prevenir estos dolores son:

1. Tener un peso adecuado.
2. Realizar ejercicio regularmente y tener buena masa muscular (es muy importante tener bastante fuerza en el cuádriceps para evitar el dolor en las rodillas).
3. Usa calzado adecuado para cada ocasión.
4. Cuidar la dieta y beber suficiente agua. Es muy importante hidratarse después de haber realizado algún esfuerzo.
5. Cuando notes alguna molestia acude a tu médico o fisioterapeuta para diagnosticarla y tratarla cuanto antes.

Las rodillas tienen ciertas peculiaridades anatómicas que hacen que sea bastante frecuente sufrir dolor en esta articulación. El abanico de lesiones posibles es muy amplio, por lo que acudir lo más pronto posible a un fisioterapeuta o médico para que realice una valoración y diagnostique la lesión. Prevenir siempre es mejor que curar, así que es muy importante el tener un peso adecuado y realizar ejercicio de manera frecuente para minimizar el riesgo de posibles lesiones y dolores en la rodilla.

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