Claudia Castilla, Especialista Contenido Médico
Los ataques de pánico son episodios intensos de miedo y ansiedad que pueden ocurrir sin previo aviso. A menudo son tan abrumadores que pueden hacer que te sientas fuera de control o incluso temer por tu vida. Pero aunque estos ataques pueden ser aterradores, no son peligrosos y pueden ser manejados.
Tabla de contenidos
En esta guía, te ayudamos a comprender lo que es un ataque de pánico, cómo identificar sus síntomas, cómo afectan tu vida diaria y, lo más importante, cómo puedes controlarlos y superarlos.
Un ataque de pánico es una respuesta de miedo extremo a una situación que no representa una amenaza real. Son impredecibles y pueden ocurrir en cualquier momento, incluso durante el sueño.
Los síntomas de un ataque de pánico pueden variar de una persona a otra, pero generalmente incluyen:
El psicólogo, Tomás López, explica que los factores de riesgo de un ataque de pánico son “por una parte biológicos: hay personas más propensas a padecer problemas de ansiedad y, por otro lado, también influye la historia de aprendizaje del individuo, tener padres ansiosos, por ejemplo, y que hayan ido modelando estrategias de afrontamiento no adaptativas”.
Es importante recordar que aunque los síntomas de un ataque de pánico pueden ser aterradores, no son peligrosos. Sin embargo, si experimentas estos síntomas regularmente, debes buscar ayuda médica para aprender a manejarlos.
Los ataques de pánico pueden afectar significativamente tu vida diaria. Pueden hacer que te sientas ansioso y temeroso, lo que puede dificultar tu capacidad para trabajar, socializar y disfrutar de las cosas que amas.
Para lidiar con los ataques de pánico, es importante que busques ayuda médica. Un psicólogo puede proporcionarte las herramientas necesarias para manejar tus ataques de pánico y reducir su impacto en tu vida. Esto puede incluir terapia cognitivo-conductual, que te ayuda a cambiar tus patrones de pensamiento que pueden desencadenar ataques de pánico, y medicamentos, que pueden ayudar a reducir los síntomas.
La psicóloga Pepa Fernández reconoce que “es importante abordar a tiempo los ataques de pánico ya que este trastorno puede provocar mucho miedo y afectar seriamente a tu calidad de vida. Debido a su carácter impredecible y a las conductas evitativas, la persona suele dejar de realizar sus actividades cotidianas interfiriendo en su vida social, familiar e incluso en el trabajo. La persona deja de asistir a reuniones, salidas e incluso al trabajo o a clase si es estudiante.
Recuperar el control durante un ataque de pánico puede parecer una tarea abrumadora, pero es posible. La psicóloga Elena González, enumera en su artículo una serie de consejos prácticos para afrontar los ataques de pánico, ya sea antes, durante o después del ataque. Considera que los más importantes durante un ataque de pánico son los siguientes:
Además, Elena González, resalta que “los ataques de pánico no están exclusivamente ligados a la población adulta, también pueden aparecer en adolescentes y niños. Siendo en este último caso más difíciles de detectar, por ello si tu hijo/a presenta dolor abdominal sin causa física aparente, sensación de mareo o desvanecimiento, nerviosismo, irritabilidad, insomnio y disminución del rendimiento escolar, es importante que acudas al pediatra para que realice una primera evaluación y, si es conveniente lo derive a un psicólogo infantil”.
Los ataques de pánico nocturnos, también conocidos como ataques de pánico del sueño, pueden ser particularmente aterradores. Pueden hacer que te despiertes en medio de la noche con una sensación intensa de miedo y ansiedad.
Para lidiar con los ataques de pánico nocturnos, la psicóloga Azucena González reconoce en su artículo que puede ser útil establecer una rutina de sueño regular o intentar acostarte y despertarte a la misma hora todos los días. Esto puede ayudar a regular tu reloj interno y reducir la posibilidad de ataques de pánico nocturnos.
Además, intenta hacer de tu habitación un lugar tranquilo y relajante. Evita la luz brillante y el ruido antes de acostarte y considera la posibilidad de utilizar técnicas de relajación, como la respiración profunda o la meditación, para ayudarte a relajarte antes de dormir.
Los ataques de pánico pueden ser aterradores y pueden tener un impacto significativo en tu vida diaria.
Con la información y las herramientas adecuadas, puedes aprender a manejar tus ataques de pánico y recuperar el control de tu vida. Recuerda que es importante buscar ayuda de un psicólogo si experimentas ataques de pánico regularmente.
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