María Jaén Moreno

El coaching es una metodología de trabajo encaminada a desarrollar y fortalecer los talentos de las personas y equipos, sin tener que identificarse con ningún trastorno o patología.

Profundiza el autoconocimiento y la fijación de objetivos a través de un proceso que desafía el compromiso de mejora a través de un plan de acción, midiendo el progreso a través de un seguimiento continuo.

El coaching no es una terapia psicológica clínica, aunque a veces en el proceso nos encontramos con que hay algún aspecto emocional que hay que trabajar para poder avanzar adecuadamente.

Metas a marcar en los procesos de Coaching:

Bienestar humano, satisfacción y mejora de la calidad de vida, en el ambiente laboral y personal.
Desarrollo de capacidades personales para afrontar la realidad y valoración de las propias capacidades para ello (tanto a nivel cognitivo como de inteligencia emocional, intra e interpersonal)

Un cambio en la percepción del entorno (cambio de observador), mayor confianza en la propia capacidad de actuar (apoyándose en las propias fortalezas y recursos personales).

Mayor eficiencia (acción diferente, mejor adaptada a sus objetivos y sistemas).

En cada ámbito de tu vida debes combinar tres conceptos: conocimiento, motivación y esfuerzo para alcanzar las metas que te propongas.

El coaching psicológico es una intervención realizada por psicólogos para promover el desarrollo y el bienestar de personas y equipos a quienes les está yendo bien y que quieren mejorar en sus vidas, carreras o trabajo.

Por lo tanto, el coaching debe verse como un método para lograr resultados basado en el apoyo profesional de un psicólogo/coach.

Genera diferentes modos de conciencia, aprendizaje y acción encaminados a lograr un objetivo específico.

Hace que sea más fácil para una persona trabajar en la forma en que se trata a sí misma para lograr el objetivo. Esto significa identificar tu forma de pensar, tus creencias, tu lenguaje, tus valores, tus emociones, tus prioridades, tus opciones, tu comportamiento, etc. en relación con la meta y tus experiencias con ella, que son áreas específicas de trabajo en psicología.

L@s psicólog@s son idóneos para la implementación del Coaching porque, además de sus conocimientos científicos, combinan las habilidades desarrolladas en el acompañamiento de las personas y el rigor deontológico que garantiza la buena praxis. (COP)

Ante estas demandas sociales, el coaching se ha erigido como un potente método de trabajo que se centra en el proceso de pensamiento y acción de la persona, con el objetivo claro de conseguir mejores resultados.

En mi trabajo, asumo la perspectiva cognitivo-conductual, que es el único tipo de psicoterapia cuyos resultados han sido validados a través de métodos científicos.

Se realiza de forma estructurada con objetivos que marcamos mediante consulta, consensuada entre el paciente y el psicólogo. Suele requerir menos sesiones, ya que es psicología práctica que se centra en mejorar la calidad de vida de las personas.

La terapia cognitivo-conductual es una herramienta útil para tratar desde trastornos psicológicos hasta aspectos relacionados con la vida diaria, siempre adaptado a tí y tus necesidades, donde el objetivo no es simplemente resolver problemas, sino aumentar tu calidad de vida.


Algunos de los motivos de consulta más frecuentes:

-Psicooncología.
- Trastornos de ansiedad, hábitos nerviosos, TOC.
- Depresión y trastornos del estado de ánimo.
- Estrés laboral, autoexigencia.
- Fobias y miedos
- Pérdidas y Duelo.
- Psicología del dolor crónico.
- Trastornos alimentarios, aprender a comer en paz.
- Psicología de la mujer.
- Reproducción y maternidad, depresión posparto.
- Adicciones y malos hábitos: a sustancias, juego, tecnología, redes sociales.
- Toma de decisiones y crecimiento personal.

En mi trabajo, asumo la perspectiva cognitivo-conductual, que es el único tipo de psicoterapia cuyos resultados han sido validados a través de métodos científicos

Desde las consultas de psicología infantojuvenil trato diversos factores que influyen en el comportamiento de los menores en esta etapa evolutiva tan importante para el desarrollo.

En la mayoría de los casos, los menores no tienen la suficiente autonomía para pedir ayuda, pero muestran inestabilidad en sus emociones (tristeza, enfado, miedo, ansiedad…) o comportamientos desadaptativos (rabietas, ira, desobediencia).

Las consultas de psicología infantil son completamente individuales y adaptadas a las necesidades y particularidades de cada niñ@ o adolescente con una duración aproximada de 45 minutos a una hora, ajustaremos la frecuencia a las necesidades del menor y de la familia.

La infancia es la época en la que la salud mental de una persona es más vulnerable.

Quizás te preguntes: ¿mi hij@ necesita acudir a un psicólogo? En caso de duda, puedes contactar con el centro vía telefónica o WhatsApp para obtener orientación directa.

Existen signos que pueden indicar problemas o dificultades de conducta en un niño:

Enojo persistente, rabietas, desobediencia, comportamiento desafiante en casa o en clase hacia reglas o figuras de autoridad.

Emociones como tristeza, desesperación, miedo… o signos de ansiedad, nerviosismo… en ocasiones incluso euforia excesiva e histrionismo.

Problemas de conducta alimentaria.

Autoexigencia con sus resultados escolares y al hacer ciertas tareas.

Preocupación excesiva por la propia imagen, obsesión por los defectos, el peso, etc.

Pesadillas y otros trastornos del sueño.

Dificultades en el desarrollo evolutivo (aprendizaje, control de los esfínteres, etc.)

Dificultad para aprender.

Aburrimiento excesivo en clase.

Atención deficitaria o Hiperactividad (TDAH).

Dificultad en las habilidades sociales: falta de relaciones con los compañeros, aislamiento...

Autoestima y autoconocimiento.

Adicción a los videojuegos, consolas, televisión, móviles…

En estas consultas ofrezco apoyo psicológico y orientación a los menores en todas las etapas desde la atención temprana, infancia y adolescencia.

Por supuesto también trabajamos estrechamente con los padres, ya que en muchas ocasiones las sesiones se basan en pautas o técnicas de modificación de conducta para afrontar las situaciones que se dan en casa y resolverlas lo antes posible.

Consulta psicológica para adolescentes.

La adolescencia es una etapa de continuo cambio y experiencia que plantea desafíos para los menores y sus padres/tutores. Los jóvenes comienzan con la maduración física y psicológica, el desarrollo de la sexualidad, los estudios, la búsqueda de grupos de referencia y patrones de relación. Los adolescentes deben adaptarse a entornos cambiantes y exigirse nuevas responsabilidades.

Esta etapa evolutiva puede provocar estrés en los adolescentes y las familias, empeorando la convivencia dentro del núcleo familiar y la comunicación con los padres o hermanos.

Las intervenciones que realizo en mis consultas de psicología en el centro Intelecto, en Jerez, se centran en conseguir un espacio de comunicación cómodo con los adolescentes, detectar y superar las diversas dificultades o patologías a las que se enfrentan, ayudarles a conseguir los objetivos que se propongan y mejorar la comunicación familiar.

Los retos a los que se enfrenta una pareja a lo largo del tiempo no son pocos: la convivencia, la rutina, los cambios vitales, la llegada de los hijos, las discusiones frecuentes, deterioro de la comunicación, la pérdida de cosas en común… Cada pareja genera sus propias estrategias para superarlos y adaptarse, pero a veces no son suficientes.
¿Qué pareja debe acudir a terapia?
Cualquiera pareja que desee mejorar la situación en la que se encuentra. Desde aquella que necesita mejorar su comunicación hasta la que quiere realizar una separación mediada.
¿Qué pretendemos?
Nuestro fin como terapeutas es identificar qué está originando y manteniendo los problemas en la relación y aportar nuevas herramientas para hacerles frente en el momento presente y en el futuro.
¿Qué diferencia nuestra terapia?
En primer lugar entendemos la terapia de pareja desde la psicológica sistémica. No observamos la situación de forma aislada sino que se tiene en consideración las relaciones con los sistemas en los que viven, especialmente se tienen en cuenta las familias de origen, amistades y entorno más cercano. La intervención busca que la pareja se readapte en todos los ámbitos de su vida.
En segundo lugar, siguiendo la escuela de Milán, la terapia se lleva a cabo por un equipo formado por dos terapeutas, esto nos reporta numerosos beneficios como: que los pacientes dispongan de más recursos que los que puede aportar un solo terapeuta. Se genera un abanico más amplio de herramientas a disposición del paciente. Permite tener un enfoque más global.

Toda pareja puede pasar por un momento difícil.

La terapia de pareja es una buena opción para aquellas personas que están pasando por un momento difícil en su relación y, aunque lo intentan, no logran comprender ni resolver estas dificultades.

Las estadísticas demuestran que acudir a terapia es una forma eficaz de mejorar las relaciones y evitar que se rompan.

En ocasiones las parejas notan que cada vez son más frecuentes los desacuerdos, que provocan un gran malestar y complican cada vez más la convivencia. En otros casos se produce un distanciamiento emocional, casi siempre provocado por la rutina diaria, que al final borra la ilusión.

La convivencia, el paso del tiempo y la rutina presentan desafíos constantes para cada pareja y pueden provocar distanciamiento o conflictos persistentes, llegando en ocasiones a la pérdida de este vínculo afectivo.

Otra causa importante de malestar en la pareja es cuando uno de los dos siente que “no está enamorado” o que “el amor se acabó”, lo que les lleva a un nivel de cansancio o decepción.

La ayuda que podemos ofreceros está orientada a identificar los problemas en la relación, mejorar aspectos para crecer juntos y fortalecer el vínculo afectivo.

¿Os reconocéis en alguna de estas situaciones en las que se debería buscar terapia de pareja?:

- Discusiones frecuentes.
- Distanciamiento emocional.
- Problemas familiares.
- Desacuerdo en educación.
- Celos, control excesivo.
- Aprender cómo navegar un proceso de separación o divorcio.
- Falta de compromiso.
- Dependencia emocional.
- Problemas de comunicación.

La terapia puede tener lugar presencialmente u online. Rigiéndonos por la escuela de Milán, nuestro servicio lo componen 2 terapeutas: María Jaén e Isabel Roldán que os acompañarán para volver a establecer el vínculo emocional.

Ayudo a las familias a encontrar soluciones a los problemas que afectan a alguno de sus miembros, a entenderos mejor unos a otros, proporcionaros conocimientos para afrontar situaciones complicadas, y restaurar vínculos de unión y confianza.

La terapia aborda todo tipo de escenarios como familias monoparentales, familias reconstituidas, familias reconstituidas, adolescentes cuya vida familiar es complicada, etc.

En mi práctica trabajo cualquier aspecto que pueda afectar negativamente la convivencia familiar.

La familia es puesta a prueba constantemente, es el lugar de nuestras primeras conexiones y apegos involucrados en el crecimiento personal, el desarrollo de la personalidad, nuestra vida interpersonal e incluso los planes profesionales.

Todo ello implica un sistema de cambio constante, que muchas veces requiere renuncias, enfrentamientos y desacuerdos difíciles de comunicar y resolver. Estas dificultades son experiencias a partir de las cuales crecemos, adaptando cómo actuar en otros ámbitos, es decir, la familia es un escenario de aprendizaje permanente.

Las situaciones más comunes con las que mis pacientes acuden a terapia familiar:

Falta de comunicación entre los miembros de la familia.

Mezcla de roles familiares.

Problemas de conducta en niños y adolescentes.

Predilecciones de uno de los miembros de la familia.

Enfermedad, salida de uno de sus miembros.

Mediación familiar en casos de separación o divorcio.

Rivalidad o conflicto entre hermanos.

Procedimientos de adopción o tutela.

Reorganización de una nueva familia.

Cambios en situaciones de la vida: trabajo, embarazo…

Si te identificas con alguno de estos puntos, no dudes en contactar conmigo.

¿Cómo puede beneficiarte asistir a terapia familiar?

Al optimizar la comunicación para que todos los involucrados puedan expresar sus sentimientos con confianza.

Al aprender a resolver conflictos cotidianos y a negociar desde el respeto.

Al conocerte mejor, hará que aumente tu confianza y puedas ser un referente para los tuyos.

Creando un ambiente familiar sano en el que cada miembro es independiente, pero al mismo tiempo se desarrolla un sentido de pertenencia a la familia.

Al saber establecer límites claros y flexibles en los que todos sepan qué objetivos deben alcanzar.

En la sociedad actual, la ansiedad es uno de los problemas psicológicos más comunes, afectando aproximadamente al 15-20% de la población en algún momento de sus vidas.

¿Pero qué es la ansiedad?
Es una reacción natural de nuestro cuerpo que se activa cuando nos sentimos amenazados, preparándonos para reaccionar de manera rápida. Sin embargo, el problema surge cuando experimentamos ansiedad en situaciones en las que no estamos en peligro.

En ocasiones, situaciones estresantes como cumplir con plazos o asistir a eventos sociales pueden generar nerviosismo en diferentes grados. Puede ser adaptativa en cierto grado, es decir, una forma leve de ansiedad puede ser beneficioso para estar alerta y preparados para enfrentar desafíos. No obstante, cuando el miedo es extremo y persistente ante ciertas situaciones, podría indicar un trastorno de ansiedad (según la Asociación Americana de Psicología, APA).

¿Qué puedo hacer para mejorar?
Existen diversas razones por las cuales alguien puede necesitar ayuda para controlar o gestionar su ansiedad de manera efectiva.

En consulta, emplearemos la terapia cognitivo-conductual (TCC), una metodología cuya eficacia ha sido demostrada científicamente. El objetivo es ayudar a las personas a identificar y manejar los factores que contribuyen a su ansiedad.

El enfoque incluye:

Comprender la naturaleza de la ansiedad y sus manifestaciones en tu vida.
Reconocer cómo tus pensamientos pueden influir en la aparición de síntomas.
Desarrollar conductas proactivas para enfrentar gradualmente situaciones estresantes en un entorno seguro.
Reducir los síntomas y minimizar las situaciones que provocan ansiedad.
Las problemáticas más comunes relacionadas con la ansiedad que tratamos incluyen trastorno de ansiedad generalizada, crisis de angustia, fobias, trastorno obsesivo compulsivo, trastorno de estrés postraumático, agorafobia, entre otros.

Es fundamental señalar la importancia de una intervención temprana para evitar complicaciones más graves. Por ejemplo, las personas que experimentan crisis de angustia a menudo evitan situaciones que temen podrían desencadenar nuevas crisis, lo que puede afectar sus responsabilidades laborales y personales.

La TCC se basa en técnicas diseñadas para detener conductas no deseadas asociadas con estos trastornos. Nuestra consulta proporciona un entorno de aprendizaje donde los pacientes comprenden cómo sus patrones de pensamiento contribuyen a los síntomas y aprenden a cambiarlos. Esto se combina con técnicas conductuales que permiten enfrentar gradualmente las situaciones temidas en un ambiente controlado y seguro.

La APA asegura que, con la psicoterapia adecuada, la mayoría de las personas diagnosticadas con trastornos de ansiedad pueden reducir o eliminar sus síntomas y volver a su funcionamiento normal después de varios meses de tratamiento.

Es importante destacar que en nuestra práctica profesional, personalizamos el tratamiento de acuerdo a las necesidades individuales de cada paciente, ya que cada persona puede responder de manera diferente al enfoque terapéutico.

Los pacientes que sufren síntomas depresivos suelen verse afectados en su vida cotidiana, es un padecimiento que puede tener graves consecuencias si no actuamos lo más rápido posible.

Las personas con depresión tienen dificultades para realizar sus actividades diarias, se sienten apáticas, agobiadas, agotadas y su capacidad para divertirse disminuye. A veces tienden a evitar los contactos sociales, incluso con familiares y seres queridos. Los problemas que normalmente enfrentaban se vuelven inalcanzables.

El objetivo del asesoramiento es ayudar al paciente con depresión a recuperar el control de su vida.

La intervención terapéutica para tratar la depresión en mi consulta se planifica de forma multidisciplinaria y, según nuestra experiencia, es la más efectiva. A partir de la terapia cognitivo-conductual, junto con otras técnicas eficaces, trabajamos el dominio cognitivo, es decir, los pensamientos del paciente, y el dominio conductual, es decir, el nivel de activación y las actividades realizadas.

Trabajando colaborativamente con el paciente, marcamos objetivos de mejora en otras áreas como la autoestima, la inteligencia emocional y asertividad, las habilidades sociales, la resolución de conflictos, etc. Identificaremos y superaremos errores de pensamiento que provocan ansiedad, malestar y estados de ánimo depresivos.

Las perspectivas de recuperación para quienes buscan ayuda profesional son muy buenas, siempre que el paciente esté involucrado.

Las personas con síntomas compatibles con la depresión tienen niveles más altos de la hormona cortisol y niveles más bajos de serotonina y otras sustancias químicas cerebrales como la dopamina, la norepinefrina y otros neurotransmisores. Estos desequilibrios bioquímicos son en gran medida responsables de los efectos sobre el estado de ánimo.

Algunos de los síntomas que presentan nuestros pacientes:

Sentirse desanimado

Tristeza, soledad, miedos.

Inestabilidad emocional.

Visión negativa del mundo y del futuro.

Labilidad emocional (cambios emocionales bruscos)

Pérdida o aumento del apetito.

No poder dormir, o dormir demasiado.

Falta de energía.

Baja autoestima.

Pensamientos recurrentes negativos.

Pérdida subjetiva de la capacidad para experimentar placer.

Dificultad para concentrarse o tomar decisiones.

Sensación de desesperanza.

Los problemas por los que acuden a consulta suelen ser:

Crisis personales.

Rupturas o problemas de relación.

Sentimientos de infravaloración o culpa.

Problemas familiares.

Problemas económicos, profesionales o sentimentales.

Si un familiar o ser querido está enfermo.

Psicooncología.

Psicología del dolor.

Dificultades para ser padres.

Depresión post-parto.

Independientemente del tipo de depresión que pueda sufrir una persona, siempre hay que someterse a un tratamiento para superarla y aprender a afrontarla para evitar posibles recaídas.

Durante el asesoramiento, cada uno de mis pacientes recibe atención individual y tratamientos adaptados a ellos para superar sus problemas de depresión.

Realizo consultas y tratamientos personales en Jerez y online en la web que elijas utilizando este enlace y siguiendo unos pasos muy sencillos.

Lo más importante en un tratamiento, ya sea online o presencial, es siempre la experiencia, conocimiento y profesionalidad del especialista así como la calidad y validez científica de las técnicas terapéuticas utilizadas.