Otros nombres: Facoemulsificación con vitrectomia.
La catarata es la opacificación del cristalino. El cristalino es un tejido transparente interno del ojo que tiene forma de lente y sirve para ver de lejos y de cerca. Con el paso de los años pierde parte de su eficacia, lo que hace necesario usar gafas para leer, y posteriormente, pierde la transparencia. Actualmente la mejor técnica es la facoemulsificación con anestesia tópica, que consiste en anestesiar el ojo, realizar una incisión pequeña, extraer el cristalino opaco disgregándolo con ultrasonidos y finalmente introducir una lente plegable colocándola en el mismo lugar donde estaba el cristalino. Esta intervención dura aproximadamente 15 minutos y sólo requiere una incisión de unos 3 mm de tamaño que no necesita puntos de sutura ni ingreso hospitalario. La facoemulsificación tiene muy pocas posibilidades de complicaciones durante la cirugía. La mayoría de complicaciones que dificultarán la recuperación de la visión se deben a que éste tiene otras patologías asociadas. Por ello, es muy importante hacer una cuidadosa y completa exploración preoperatoria para conocer el estado real del ojo. Retrasar la intervención hasta que el paciente no vea nada implica una mayor posibilidad de complicaciones en el momento de la cirugía.