Otros nombres: Cirugía del dedo de resorte, Dedo en resorte - Tratamiento quirúrgico
La estenosante, comúnmente conocida como dedo en gatillo, afecta a los tendones en la mano que flexionan los dedos. Los tendones funcionan como si fueran una larga cuerda que conecta los músculos del antebrazo con los huesos de los dedos y el pulgar. En los dedos, las poleas forman un túnel bajo el cual los tendones se deslizan. Estas poleas mantienen a los tendones en estrecha relación al hueso. Los tendones y el túnel tienen por dentro un liso revestimiento que les permite un facil deslizamiento a través de las poleas. El Dedo en gatillo se desarrolla cuando los tendones forman un nódulo o inflamación de su revestimiento. Cuando los tendones se inflaman se estrecha su paso a través del espacio del túnel (vaina flexora), lo que causa dolor, chasquido o una sensación de atrapamiento en el dedo o pulgar. Cuando el tendón se atrapa produce inflamación, lo que causa un círculo vicioso de atrapamiento, inflamación e hinchazón. En ocasiones el dedo se traba, siendo difícil extenderlo o flexionarlo. El objetivo del tratamiento en el dedo (a menudo pulgar) en gatillo es eliminar que se trabe y así permitir un movimiento completo del dedo sin molestias. Se debe reducir la inflamación alrededor del tendón flexor y vaina tendinosa para permitir un suave deslizamiento. El uso de una férula o medicamentos antiinflamatorios por boca o una inyección en el área alrededor del tendón puede ser recomendado para reducir la inflamación. El tratamiento para reducir la inflamación también puede considerar un cambio de actividades del paciente. Pero si persistne los síntomas, la cirugía es la opción recomendada. Habitualmente se realiza en forma ambulatoria. El objetivo de la cirugía es abrir la primera polea de tal forma que el tendón se pueda deslizar libremente. La movilidad activa del dedo generalmente comienza inmediatamente después de la cirugía. El uso normal de la mano usualmente puede ser reasumido una vez que ceden las molestias propias de la cirugía. Algunos pacientes, mas que otros, pueden sentir dolor, molestias, incomodidad e inflamación en relación con el área de la cirugía. Ocasionalmente, es necesario de la mano tras la cirugía, para lograr una función optima.
La estenosante, comúnmente conocida como dedo en gatillo, afecta a los tendones en la mano que flexionan los dedos. Los tendones funcionan como si fueran una larga cuerda que conecta los músculos del antebrazo con los huesos de los dedos y el pulgar. En los dedos, las poleas forman un túnel bajo el cual los tendones se deslizan. Estas poleas mantienen a los tendones en estrecha relación al hueso. Los tendones y el túnel tienen por dentro un liso revestimiento que les permite un facil deslizamiento a través de las poleas. El Dedo en gatillo se desarrolla cuando los tendones forman un nódulo o inflamación de su revestimiento. Cuando los tendones se inflaman se estrecha su paso a través del espacio del túnel (vaina flexora), lo que causa dolor, chasquido o una sensación de atrapamiento en el dedo o pulgar. Cuando el tendón se atrapa produce inflamación, lo que causa un círculo vicioso de atrapamiento, inflamación e hinchazón. En ocasiones el dedo se traba, siendo difícil extenderlo o flexionarlo. El objetivo del tratamiento en el dedo (a menudo pulgar) en gatillo es eliminar que se trabe y así permitir un movimiento completo del dedo sin molestias. Se debe reducir la inflamación alrededor del tendón flexor y vaina tendinosa para permitir un suave deslizamiento. El uso de una férula o medicamentos antiinflamatorios por boca o una inyección en el área alrededor del tendón puede ser recomendado para reducir la inflamación. El tratamiento para reducir la inflamación también puede considerar un cambio de actividades del paciente. Pero si persistne los síntomas, la cirugía es la opción recomendada. Habitualmente se realiza en forma ambulatoria. El objetivo de la cirugía es abrir la primera polea de tal forma que el tendón se pueda deslizar libremente. La movilidad activa del dedo generalmente comienza inmediatamente después de la cirugía. El uso normal de la mano usualmente puede ser reasumido una vez que ceden las molestias propias de la cirugía. Algunos pacientes, mas que otros, pueden sentir dolor, molestias, incomodidad e inflamación en relación con el área de la cirugía. Ocasionalmente, es necesario de la mano tras la cirugía, para lograr una función optima.
Dr. Josep Pous Barral
Traumatólogo, Médico rehabilitador, Especialista en medicina regenerativa
Barcelona