Hola Soy un chico de 30 años que vive con sus padres, una hermana menor y nuestro perro de famili
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Hola
Soy un chico de 30 años que vive con sus padres, una hermana menor y nuestro perro de familia
Actualmente tengo un trabajo estable, y hace un año me encontraba viviendo solo con un amigo en una vivienda de alquiler. La verdad que la situación no era del todo independiente, ya que mi trabajo siempre me ha quedado cerca de casa de mis padres, y eso y que me tira mucho estar con ellos y sobretodo con mi perro, que lo quiero mucho, siempre he comido ahí a la salida del trabajo y luego cogía la cena. Lo que prácticamente hacía que estuviera poco más de la noche para dormir en mi nueva casa de alquiler, pero el resto del día lo pasaba fuera.
Mi amigo, compañero de piso, se busco un piso de compra con su novia para mudarse en Marzo, y me tocó volver a vivir con mis padres.
No es que no me importase, de hecho a mis padres los quiero mucho. Pero el día de ayer creo que sufrí una crisis de algún tipo, porque me vi sin poder avanzar en la vida. Me da miedo que algo les pueda pasar.
He tenido miedo por morir, casi pánico, pero también me da pánico seguir con este ritmo de vida de trabajo, de salir de trabajar e ir a casa, de mis padres, así eternamente.
Antes no se porque tenía intención de vivir solo, pero también me he dado cuenta que tengo algo de dependencia, y no sé si podría. O al menos no en la misma ciudad, porque además de querer con locura a mi perro, con mis padres sigo pensando que soy como su niño pequeño, que no crece ya ellos no les importa, no me meten prisa.
Pero como digo, el día de ayer sufrí una crisis, como siempre me lo como emocionalmente. Se que hablarlo me ayudaría, pero no sé
Tampoco se bien que quiero en la vida. En la mía no he disfrutado de mucha actividades, fuera de mi familia. Tengo amigos, pocos, pero los tengo. Pero nunca he realizado con ellos actividades interesantes, más allá de salir por ls noche, nada en particular.
He tenido pensamientos suicidadas, aunque lo que más temo es la muerte de mis padres como pilares de mi vida. Con mi padre me llevo muy bien, siempre lo he tenido como apoyo y eso no se hasta que punto me debilita.
Creo que igual viajar un poco, cosa que apenas hago desde hace mucho, me aliviaría el hecho de visitar otros entornos.
La vida ,hoy en día, está muy difícil o yo la veo muy difícil. He tenido verdaderos momentos de vacío emocional, de estar sin sentir nada. Y los días lluviosos y tristes de invierno, estar encerrado con tus padres como cuando tenías diez años, me mata, metafísicamente pero.
Me gustaría dejarles este mensaje, pero creo no voy a poder. Ellos me preguntan, y está semana si que les comenté estaba algo decaído, pero mis padres son muy positivos, o mi padre al menos, mi madre piensa que todo se cura con tomar una pastilla. Cuando veo es algo más existencial.
Mi vida, ahora mismo, no sé para qué la estoy viviendo.. pero a la vez, la muerte me aterra, la muerte de no vivir algo diferente. Cuando en realidad solo busco algo de calidez, porque morir nos morimos todos, pero estar en soledad con estos pensamientos es muy duro, se me hace muy duro día día
Gracias
Soy un chico de 30 años que vive con sus padres, una hermana menor y nuestro perro de familia
Actualmente tengo un trabajo estable, y hace un año me encontraba viviendo solo con un amigo en una vivienda de alquiler. La verdad que la situación no era del todo independiente, ya que mi trabajo siempre me ha quedado cerca de casa de mis padres, y eso y que me tira mucho estar con ellos y sobretodo con mi perro, que lo quiero mucho, siempre he comido ahí a la salida del trabajo y luego cogía la cena. Lo que prácticamente hacía que estuviera poco más de la noche para dormir en mi nueva casa de alquiler, pero el resto del día lo pasaba fuera.
Mi amigo, compañero de piso, se busco un piso de compra con su novia para mudarse en Marzo, y me tocó volver a vivir con mis padres.
No es que no me importase, de hecho a mis padres los quiero mucho. Pero el día de ayer creo que sufrí una crisis de algún tipo, porque me vi sin poder avanzar en la vida. Me da miedo que algo les pueda pasar.
He tenido miedo por morir, casi pánico, pero también me da pánico seguir con este ritmo de vida de trabajo, de salir de trabajar e ir a casa, de mis padres, así eternamente.
Antes no se porque tenía intención de vivir solo, pero también me he dado cuenta que tengo algo de dependencia, y no sé si podría. O al menos no en la misma ciudad, porque además de querer con locura a mi perro, con mis padres sigo pensando que soy como su niño pequeño, que no crece ya ellos no les importa, no me meten prisa.
Pero como digo, el día de ayer sufrí una crisis, como siempre me lo como emocionalmente. Se que hablarlo me ayudaría, pero no sé
Tampoco se bien que quiero en la vida. En la mía no he disfrutado de mucha actividades, fuera de mi familia. Tengo amigos, pocos, pero los tengo. Pero nunca he realizado con ellos actividades interesantes, más allá de salir por ls noche, nada en particular.
He tenido pensamientos suicidadas, aunque lo que más temo es la muerte de mis padres como pilares de mi vida. Con mi padre me llevo muy bien, siempre lo he tenido como apoyo y eso no se hasta que punto me debilita.
Creo que igual viajar un poco, cosa que apenas hago desde hace mucho, me aliviaría el hecho de visitar otros entornos.
La vida ,hoy en día, está muy difícil o yo la veo muy difícil. He tenido verdaderos momentos de vacío emocional, de estar sin sentir nada. Y los días lluviosos y tristes de invierno, estar encerrado con tus padres como cuando tenías diez años, me mata, metafísicamente pero.
Me gustaría dejarles este mensaje, pero creo no voy a poder. Ellos me preguntan, y está semana si que les comenté estaba algo decaído, pero mis padres son muy positivos, o mi padre al menos, mi madre piensa que todo se cura con tomar una pastilla. Cuando veo es algo más existencial.
Mi vida, ahora mismo, no sé para qué la estoy viviendo.. pero a la vez, la muerte me aterra, la muerte de no vivir algo diferente. Cuando en realidad solo busco algo de calidez, porque morir nos morimos todos, pero estar en soledad con estos pensamientos es muy duro, se me hace muy duro día día
Gracias
Gracias por abrirte y compartir lo que estás viviendo. Lo que expresas es muy importante y merece ser escuchado con atención. Me preocupa lo que estás sintiendo, especialmente esos momentos de vacío y los pensamientos que has mencionado. Es fundamental que puedas hablar con un especialista que pueda escucharte en profundidad, ayudarte a comprender lo que está pasando y ofrecerte un diagnóstico adecuado. Esto no solo te permitirá entender mejor tus emociones, sino también encontrar las herramientas necesarias para sentirte mejor y avanzar hacia una vida más plena. Estoy aquí para acompañarte y apoyarte en lo que necesites. No estás solo en este camino.
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Buenas tardes, primero de todo, muchas gracias por compartir cómo te sientes. Considero que sería recomendable que realizaras terapia cognitivo-conductual, ya que te ayudaría a entender y gestionar mejor tus emociones, conductas y pensamientos. Sé que es complicado dar el primer paso y abrirte a una persona que no conoces, pero si le das una oportunidad encontrarás un espacio seguro, sin juicios y totalmente para ti en el que podrás analizar más en detalle tu malestar y obtener herramientas para reducirlo. Espero haberte ayudado. Un abrazo
En ocasiones, nuestra vida se ve alterada por cambios a los que intentamos adaptarnos la mayoria de las veces nos vemos en la tesitura de no tener tiempo para poder digerirlos y que esta adaptación sea progresiva para poder integrarlos de la mejor manera para cada uno. Se puede vivir incluso como una regresión, parece que lo habiamos avanzado, se ha perdido. La buena noticia es que solo es una percepción, propia de la velocidad en que ha sucedido la situación.
Por supuesto que aprender es una motivición para entender el origen, evolución de lo que nos rodea, y es especialmente apasionante.
Conocernos bien, nos trae la comprensión de lo que sentimos tambié de lo que percibimos por ser quienes somos. Las situaciones pueden analizarse desde diferentes perspectivas que nos liberan de la rigidez de pensamientos negativos.
El ser humano ha ido evolucionando por el sentimiento de pertenencia, que inspira muchos de nuestros actos. Somos una especie que necesita de nuestros congeneres para sobrevivir, y este instinto ancestral se muestra hoy en dia en todos sus matices en la sociedad mas informada y comunicada de la historia. Esta evidencia y la de que la persona evoluciona mediante la superación de etapas vitales que se experimentan como crisis. De estas crisis resurge una nueva adaptación y lo más interesante, va a influir en el entorno de manera profunda. Es decir, la imagen seria igual que una figura hecha con fichas de domino, que cuando una cae, la energia de este moviento, activa que caiga la ficha siguiente, y esta provoca la cida de la que le sigue, produciendo una reacción en cadena.
Ciertamente el senimiento de soledad tambien es innato de la persona, pero si ampliamos nuestra mirada, somos como estas fichas de dominó, solas cada una en el tablero, pero formando parte del TODO.
Por supuesto que aprender es una motivición para entender el origen, evolución de lo que nos rodea, y es especialmente apasionante.
Conocernos bien, nos trae la comprensión de lo que sentimos tambié de lo que percibimos por ser quienes somos. Las situaciones pueden analizarse desde diferentes perspectivas que nos liberan de la rigidez de pensamientos negativos.
El ser humano ha ido evolucionando por el sentimiento de pertenencia, que inspira muchos de nuestros actos. Somos una especie que necesita de nuestros congeneres para sobrevivir, y este instinto ancestral se muestra hoy en dia en todos sus matices en la sociedad mas informada y comunicada de la historia. Esta evidencia y la de que la persona evoluciona mediante la superación de etapas vitales que se experimentan como crisis. De estas crisis resurge una nueva adaptación y lo más interesante, va a influir en el entorno de manera profunda. Es decir, la imagen seria igual que una figura hecha con fichas de domino, que cuando una cae, la energia de este moviento, activa que caiga la ficha siguiente, y esta provoca la cida de la que le sigue, produciendo una reacción en cadena.
Ciertamente el senimiento de soledad tambien es innato de la persona, pero si ampliamos nuestra mirada, somos como estas fichas de dominó, solas cada una en el tablero, pero formando parte del TODO.
Estás atravesando una crisis existencial marcada por una sensación de vacío y estancamiento que te lleva a cuestionarte el propósito de tu vida y el miedo a avanzar hacia lo desconocido. La dependencia emocional hacia tus padres y tu perro, combinada con la comodidad de lo familiar, te ha mantenido en una zona de confort que, aunque te aporta seguridad, también te genera ansiedad y frustración. Este apego emocional es completamente normal, especialmente cuando se ha construido una relación de apoyo mutuo, pero está limitando tu capacidad de desarrollo personal e independencia.
El miedo a la muerte, tanto la tuya como la de tus padres, y la sensación de estar atrapado en una rutina monótona, han alimentado pensamientos negativos recurrentes y momentos de vacío emocional. Estos pensamientos surgen porque, aunque sientes afecto por tu entorno, también eres consciente de que necesitas algo más para sentirte realizado. Sin embargo, ese "algo más" no lo encontrarás permaneciendo en la misma dinámica actual. Es importante que empieces a ver el cambio como una oportunidad de crecimiento, no como una amenaza.
Reconocer que sientes esta crisis es un paso muy valiente, pero ahora es crucial que tomes pequeñas acciones para reconectar contigo mismo y salir de la rutina que te ha mantenido atrapado. El primer paso es aceptar que tus miedos, como el miedo a la muerte o a la soledad, son naturales y que no puedes controlar todo lo que ocurra en tu entorno. Lo que sí puedes controlar es tu forma de vivir el presente y tomar decisiones que te lleven hacia una vida más plena.
Una forma de empezar es identificar actividades que realmente te interesen, como viajar o iniciar proyectos personales, y darles espacio en tu vida. El cambio no tiene que ser radical; pequeños pasos pueden marcar una gran diferencia. Además, trabajar en tu dependencia emocional no significa alejarte de tus padres, sino encontrar un equilibrio donde puedas disfrutar de su compañía sin que ello defina toda tu identidad.
Por otro lado, es fundamental que rompas con los pensamientos negativos recurrentes que te están paralizando. Practicar técnicas como la meditación o el mindfulness puede ayudarte a enfocarte en el presente, reduciendo la ansiedad anticipatoria. Cuando los pensamientos sobre la muerte o el miedo a no avanzar en la vida te invadan, identifica esas ideas como pensamientos pasajeros que no tienen por qué definir tu realidad.
Finalmente, si sientes que expresar todo esto te resulta complicado, escribir una carta a tus padres puede ser un ejercicio muy útil para aclarar tus emociones. No tienes que entregarla, pero te ayudará a organizar tus pensamientos y a preparar un diálogo sincero con ellos cuando te sientas listo.
Tu vida no está estancada ni vacía; lo que necesitas es reconectar con tus intereses y explorar nuevas experiencias que te permitan descubrir quién eres fuera del entorno familiar. La clave está en dar pasos pequeños pero constantes hacia una versión de ti mismo que se sienta más libre y realizada. Recuerda que el cambio es un proceso y que mereces vivir una vida que te haga sentir pleno y en paz contigo mismo.
El miedo a la muerte, tanto la tuya como la de tus padres, y la sensación de estar atrapado en una rutina monótona, han alimentado pensamientos negativos recurrentes y momentos de vacío emocional. Estos pensamientos surgen porque, aunque sientes afecto por tu entorno, también eres consciente de que necesitas algo más para sentirte realizado. Sin embargo, ese "algo más" no lo encontrarás permaneciendo en la misma dinámica actual. Es importante que empieces a ver el cambio como una oportunidad de crecimiento, no como una amenaza.
Reconocer que sientes esta crisis es un paso muy valiente, pero ahora es crucial que tomes pequeñas acciones para reconectar contigo mismo y salir de la rutina que te ha mantenido atrapado. El primer paso es aceptar que tus miedos, como el miedo a la muerte o a la soledad, son naturales y que no puedes controlar todo lo que ocurra en tu entorno. Lo que sí puedes controlar es tu forma de vivir el presente y tomar decisiones que te lleven hacia una vida más plena.
Una forma de empezar es identificar actividades que realmente te interesen, como viajar o iniciar proyectos personales, y darles espacio en tu vida. El cambio no tiene que ser radical; pequeños pasos pueden marcar una gran diferencia. Además, trabajar en tu dependencia emocional no significa alejarte de tus padres, sino encontrar un equilibrio donde puedas disfrutar de su compañía sin que ello defina toda tu identidad.
Por otro lado, es fundamental que rompas con los pensamientos negativos recurrentes que te están paralizando. Practicar técnicas como la meditación o el mindfulness puede ayudarte a enfocarte en el presente, reduciendo la ansiedad anticipatoria. Cuando los pensamientos sobre la muerte o el miedo a no avanzar en la vida te invadan, identifica esas ideas como pensamientos pasajeros que no tienen por qué definir tu realidad.
Finalmente, si sientes que expresar todo esto te resulta complicado, escribir una carta a tus padres puede ser un ejercicio muy útil para aclarar tus emociones. No tienes que entregarla, pero te ayudará a organizar tus pensamientos y a preparar un diálogo sincero con ellos cuando te sientas listo.
Tu vida no está estancada ni vacía; lo que necesitas es reconectar con tus intereses y explorar nuevas experiencias que te permitan descubrir quién eres fuera del entorno familiar. La clave está en dar pasos pequeños pero constantes hacia una versión de ti mismo que se sienta más libre y realizada. Recuerda que el cambio es un proceso y que mereces vivir una vida que te haga sentir pleno y en paz contigo mismo.
Hola! Las crisis como la que has vivido, que se asemeja a ansiedad o pánico suelen ser señales que nos manda el cuerpo de que algo no está bien para nosotros, aunque pueda parecer que sí. No lo desoigas y comienza una terapia si esto te sigue pasando o se acompaña de síntomas depresivos. Todo tiene solución si se trabaja con un profesional. Un abrazo!
Primero quiero que sepas que tus sentimientos son válidos. Lo que describes es una mezcla de emociones muy intensas: miedo al futuro, miedo a la muerte, crisis existencial, y una sensación de vacío que te está ahogando. Es completamente normal sentirse así en ciertos momentos de la vida, pero también es importante que reconozcas que estás atravesando un momento delicado que puede mejorar si encuentras las herramientas adecuadas para lidiar con estas emociones.
Lo que mencionas sobre sentirte atrapado entre la dependencia de tus padres y el miedo a perderlos es algo muy común en muchas personas que atraviesan tu etapa de vida, especialmente cuando las relaciones familiares son muy fuertes. Crecer y ser independiente puede generar mucha incertidumbre, porque sientes que una parte de tu identidad está muy ligada a tu familia, a tu perro, a tu entorno. Pero esa independencia no tiene que significar cortar esos lazos, sino encontrar un equilibrio donde puedas seguir siendo tú mismo, disfrutar de tu familia, pero también explorar tu vida fuera de ese núcleo.
Los pensamientos suicidas son algo que siempre debe tomarse muy en serio. Es importante que hables con un profesional, un terapeuta o psicólogo, que pueda ayudarte a procesar estos miedos y darte herramientas para enfrentarlos. Los pensamientos de "no saber para qué vivir" son síntomas comunes de la depresión o de una crisis existencial, y aunque es difícil salir de ellos por uno mismo, es posible hacerlo con el apoyo adecuado.
Viajar, salir de la rutina, conocer otros lugares, conocer otras personas, son experiencias que pueden ayudarte a romper ese vacío y encontrar nuevas perspectivas, pero lo más importante es que tu bienestar emocional se cuide ahora, aquí y en este momento. La soledad que sientes no tiene que definir tu vida, y no estás solo en ella. Hay maneras de salir de esta sensación de "vacío existencial" y de la frustración de sentir que la vida es difícil. A veces, dar pequeños pasos como hablar con alguien sobre lo que sientes, incluso escribir, puede ser un inicio.
Lo más importante ahora es que no ignores lo que sientes. Puedes seguir adelante, y mereces tener una vida que te haga sentir bien, que te dé sentido. Si sientes que hablar con tus padres no es lo que necesitas en este momento, buscar un espacio más privado y profesional podría ser un buen primer paso. La terapia no solo te ayudará a entenderte mejor, sino que también te puede dar las herramientas para encontrar tu propósito, para vivir de una forma más tranquila y con mayor sentido de lo que estás haciendo.
Recuerda que hay ayuda disponible y que no tienes que hacer todo esto solo. La vida puede ser difícil, pero también está llena de posibilidades para crecer, aprender y encontrar paz. No estás perdido, aunque a veces lo sientas. Hay un camino hacia la luz, aunque ahora parezca difícil de ver.
Espero haberte ayudado, un abrazo.
Lo que mencionas sobre sentirte atrapado entre la dependencia de tus padres y el miedo a perderlos es algo muy común en muchas personas que atraviesan tu etapa de vida, especialmente cuando las relaciones familiares son muy fuertes. Crecer y ser independiente puede generar mucha incertidumbre, porque sientes que una parte de tu identidad está muy ligada a tu familia, a tu perro, a tu entorno. Pero esa independencia no tiene que significar cortar esos lazos, sino encontrar un equilibrio donde puedas seguir siendo tú mismo, disfrutar de tu familia, pero también explorar tu vida fuera de ese núcleo.
Los pensamientos suicidas son algo que siempre debe tomarse muy en serio. Es importante que hables con un profesional, un terapeuta o psicólogo, que pueda ayudarte a procesar estos miedos y darte herramientas para enfrentarlos. Los pensamientos de "no saber para qué vivir" son síntomas comunes de la depresión o de una crisis existencial, y aunque es difícil salir de ellos por uno mismo, es posible hacerlo con el apoyo adecuado.
Viajar, salir de la rutina, conocer otros lugares, conocer otras personas, son experiencias que pueden ayudarte a romper ese vacío y encontrar nuevas perspectivas, pero lo más importante es que tu bienestar emocional se cuide ahora, aquí y en este momento. La soledad que sientes no tiene que definir tu vida, y no estás solo en ella. Hay maneras de salir de esta sensación de "vacío existencial" y de la frustración de sentir que la vida es difícil. A veces, dar pequeños pasos como hablar con alguien sobre lo que sientes, incluso escribir, puede ser un inicio.
Lo más importante ahora es que no ignores lo que sientes. Puedes seguir adelante, y mereces tener una vida que te haga sentir bien, que te dé sentido. Si sientes que hablar con tus padres no es lo que necesitas en este momento, buscar un espacio más privado y profesional podría ser un buen primer paso. La terapia no solo te ayudará a entenderte mejor, sino que también te puede dar las herramientas para encontrar tu propósito, para vivir de una forma más tranquila y con mayor sentido de lo que estás haciendo.
Recuerda que hay ayuda disponible y que no tienes que hacer todo esto solo. La vida puede ser difícil, pero también está llena de posibilidades para crecer, aprender y encontrar paz. No estás perdido, aunque a veces lo sientas. Hay un camino hacia la luz, aunque ahora parezca difícil de ver.
Espero haberte ayudado, un abrazo.
Lo primero que quiero decirte es que es valiente de tu parte el haber compartido lo que estás sintiendo, y es completamente válido sentirte perdido, asustado o confundido en momentos como este. Las crisis existenciales pueden ser muy intensas y abrumadoras, pero es importante recordar que no estás solo en esto y que se puede buscar apoyo para atravesar estos momentos.
Lo que estás experimentando parece estar relacionado con varias emociones y preocupaciones: el miedo a la muerte de tus padres, la sensación de no estar avanzando en la vida, el vacío emocional, y la preocupación por la dependencia. A veces, cuando no sabemos lo que queremos o no sabemos cómo avanzar, esto puede generar ansiedad, pensamientos negativos y sentimientos de soledad, aunque estés rodeado de gente que te quiere.
Lo que estás experimentando parece estar relacionado con varias emociones y preocupaciones: el miedo a la muerte de tus padres, la sensación de no estar avanzando en la vida, el vacío emocional, y la preocupación por la dependencia. A veces, cuando no sabemos lo que queremos o no sabemos cómo avanzar, esto puede generar ansiedad, pensamientos negativos y sentimientos de soledad, aunque estés rodeado de gente que te quiere.
Gracias por compartir algo tan profundo y personal. Lo que describes refleja una lucha interna importante, pero también una conexión con la vida que te motiva a buscar un cambio. Es normal sentirse perdido a veces, especialmente cuando uno se enfrenta a preguntas existenciales y sentimientos de vacío. Sin embargo, tus ganas de encontrar calidez, sentido y algo diferente son un gran punto de partida.
Hablar con alguien de confianza o un profesional puede ser un primer paso liberador. Un terapeuta podría ayudarte a explorar tus emociones, identificar lo que necesitas, y trazar pequeños pasos hacia una vida más plena. Viajar o experimentar cosas nuevas también puede ser una buena manera de romper con la rutina y descubrir intereses que te llenen.
Recuerda que no estás solo en esto, y buscar apoyo no es señal de debilidad, sino de valentía. Te mereces vivir una vida con sentido y calidez, y dar este primer paso puede marcar la diferencia.
Hablar con alguien de confianza o un profesional puede ser un primer paso liberador. Un terapeuta podría ayudarte a explorar tus emociones, identificar lo que necesitas, y trazar pequeños pasos hacia una vida más plena. Viajar o experimentar cosas nuevas también puede ser una buena manera de romper con la rutina y descubrir intereses que te llenen.
Recuerda que no estás solo en esto, y buscar apoyo no es señal de debilidad, sino de valentía. Te mereces vivir una vida con sentido y calidez, y dar este primer paso puede marcar la diferencia.
Lamento mucho que te sientas de esta manera. Es natural tener momentos de duda y crisis existenciales, pero la clave está en intentar reconocer lo que te está pasando y buscar el apoyo adecuado. El hecho de que sientas miedo a la muerte y vacío emocional puede ser señal de que necesitas un cambio en tu vida, tal vez en la forma en que te conectas contigo mismo, con tus intereses y metas personales. Vivir con tus padres puede generar una sensación de confort, pero también limita tu autonomía y desarrollo personal. Si sientes que hay un estancamiento emocional, es importante que busques un espacio para ti, incluso si eso significa empezar a explorar nuevas actividades, hacer viajes o proyectos que te conecten con tu propósito. Hablar con un profesional puede ayudarte a trabajar sobre tus miedos y el vacío que experimentas. Tu bienestar es esencial, y aunque es difícil, el primer paso es hablar sobre lo que sientes, ya sea con un terapeuta o alguien de confianza.
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