Hola, Necesito que un psicólogo o psiquiatra me ayude. Llevo tres años saliendo con un hombre 17 añ
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Hola,
Necesito que un psicólogo o psiquiatra me ayude. Llevo tres años saliendo con un hombre 17 años mayor que yo con una hija (le conocí en el trabajo anterior). Desde que empecé con él he tenido muchas dudas. Sobre todo por su edad su ex familia etc. Es la persona más buena que he encontrado en mi vida, me cuida me ayuda en todo lo que necesito, está pendiente de mí es super generoso conmigo, es adorable. Yo le llevo machacando psicologicamente toda la relación a base de reproches sobre su edad, su hija, el futuro que nos espera juntos. En dos ocasiones me dejó por un tiempo fruto de mis malos comentarios y dudas constantes. En la última ruptura, él volvió le dije que yo no lo tenía claro pero siento que luego me vuelve a envolver con su ternura, su nobleza, me lleva a planes guays a viajes y disfruto mucho con él. Me lo paso muy bien con él. Desde hace tres meses estamos todo el día juntos, duerme cada día en mi casa y siempre estamos planeando cosas juntos. Yo estoy contenta con él pero siento que siguen estando ahí las dudas (es como un negativismo absoluto que tengo en mi cabeza). A menudo, sobre todo después de un viaje juntos, pienso en acabar con él. Tengo 29 años ganas de casarme y de tener hijos y él lo está deseando. Pero las dudas me invaden. Como estamos prácticamente siempre juntos, las suelo tener cuando él se va con su hija o cuando estoy durmiendo. Estoy a su lado en la cama y no consigo dormir, lloro y le vuelvo a decir que tengo dudas pero al día siguiente me tranquiliza y me plantea vernos para comer o cenar y acepto porque me apetece. No sé que hacer con él. Por un lado le quiero muchísimo y sé que no hay otro hombre más increible y bueno en el mundo pero por otra sigo teniendo tantas dudas que no me dejan disfrutar. No soy feliz al cien por cien. Cuando estuve esos tres meses sola (segunda vez que me dejó) estuve bien conocí a gente y ahora no sé como dejar de verle. No sé que me pasa y tengo ganas de llorar.
Necesito que un psicólogo o psiquiatra me ayude. Llevo tres años saliendo con un hombre 17 años mayor que yo con una hija (le conocí en el trabajo anterior). Desde que empecé con él he tenido muchas dudas. Sobre todo por su edad su ex familia etc. Es la persona más buena que he encontrado en mi vida, me cuida me ayuda en todo lo que necesito, está pendiente de mí es super generoso conmigo, es adorable. Yo le llevo machacando psicologicamente toda la relación a base de reproches sobre su edad, su hija, el futuro que nos espera juntos. En dos ocasiones me dejó por un tiempo fruto de mis malos comentarios y dudas constantes. En la última ruptura, él volvió le dije que yo no lo tenía claro pero siento que luego me vuelve a envolver con su ternura, su nobleza, me lleva a planes guays a viajes y disfruto mucho con él. Me lo paso muy bien con él. Desde hace tres meses estamos todo el día juntos, duerme cada día en mi casa y siempre estamos planeando cosas juntos. Yo estoy contenta con él pero siento que siguen estando ahí las dudas (es como un negativismo absoluto que tengo en mi cabeza). A menudo, sobre todo después de un viaje juntos, pienso en acabar con él. Tengo 29 años ganas de casarme y de tener hijos y él lo está deseando. Pero las dudas me invaden. Como estamos prácticamente siempre juntos, las suelo tener cuando él se va con su hija o cuando estoy durmiendo. Estoy a su lado en la cama y no consigo dormir, lloro y le vuelvo a decir que tengo dudas pero al día siguiente me tranquiliza y me plantea vernos para comer o cenar y acepto porque me apetece. No sé que hacer con él. Por un lado le quiero muchísimo y sé que no hay otro hombre más increible y bueno en el mundo pero por otra sigo teniendo tantas dudas que no me dejan disfrutar. No soy feliz al cien por cien. Cuando estuve esos tres meses sola (segunda vez que me dejó) estuve bien conocí a gente y ahora no sé como dejar de verle. No sé que me pasa y tengo ganas de llorar.
Hola, en primer lugar, gracias por tu confianza. Siento que estés pasando por este proceso. Parece que existe un bloqueo en ti desde el inicio de la relación y que se ha convertido en algo persistente acerca de la diferencia de edad. Por lo que afirmas, no has podido superarlo. De ahí vendrían todas las dudas que se te plantean, y por tanto las idas y venidas. Afirmas que a causa de este bloqueo, tienes malos comportamientos hacia él, por lo que es algo que habría que solucionar para poder seguir adelante con la relación. Además de ello, en tu planteamiento también afirmas la existencia de dudas acerca de su fidelidad. Seguramente habrá muchos puntos a revisar; como el hecho de que pienses “no existe otro hombre como el". Estás vivenciando el proceso de conocer lo que verdaderamente quieres, de manera angustiante, lo que te provoca, llantos, insomnio…, por ello te recomendaría consultaras con un profesional, que te ayude primero a ser consciente de lo que realmente quieres y a partir de ahí trabajar para o mantener o abandonar la relación de la mejor forma posible.
Espero de verdad, haberte podido ayudar, que tengas un buen día,
Un saludo.
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Hola;
Podríamos enfocar el problema desde una doble vertiente. Por un lado habría que ver si realmente él te gusta o si, por el contrario, él suple alguna carencia tuya. Por otro lado, algo que por lo que cuentas dices, y que tiene que ver con lo anterior, quizá estés o estéis experimentando Refuerzo Intermitente (busca información en YouTube, hay vídeos, yo tengo alguno). Seguro que te vendría genial acudir a un profesional y trabajar un poco en lo que te he comentado.
Un saludo.
Podríamos enfocar el problema desde una doble vertiente. Por un lado habría que ver si realmente él te gusta o si, por el contrario, él suple alguna carencia tuya. Por otro lado, algo que por lo que cuentas dices, y que tiene que ver con lo anterior, quizá estés o estéis experimentando Refuerzo Intermitente (busca información en YouTube, hay vídeos, yo tengo alguno). Seguro que te vendría genial acudir a un profesional y trabajar un poco en lo que te he comentado.
Un saludo.
Buenas tardes.
Parece que el problema de pareja que comentas y que tanto sufrimiento te está generando tiene que ver más con cómo te ves tú de cara a la sociedad que de una dificultad en la relación de pareja. Sería interesante que pudieras conocer qué hay detrás de cómo te percibes. Un buen autoconocimiento y autoestima te va a proporcionar seguridad en tus decisiones, sin que te cuestiones constantemente.
Un profesional de la psicología podría realizar una evaluación de tu caso y una vez que sepa que tipo de problema está limitando tu día a día podrá proponerte el tratamiento que mejor se adapte a ti.
Parece que el problema de pareja que comentas y que tanto sufrimiento te está generando tiene que ver más con cómo te ves tú de cara a la sociedad que de una dificultad en la relación de pareja. Sería interesante que pudieras conocer qué hay detrás de cómo te percibes. Un buen autoconocimiento y autoestima te va a proporcionar seguridad en tus decisiones, sin que te cuestiones constantemente.
Un profesional de la psicología podría realizar una evaluación de tu caso y una vez que sepa que tipo de problema está limitando tu día a día podrá proponerte el tratamiento que mejor se adapte a ti.
Buenos días.
Añadiendo algo a lo que han dicho los compañeros desde una perspectiva cognitivo conductual: tienes un problema, pero tengo la sensación de que no lo puedes resolver porque faltan cosas por aclarar.
Puedes utilizar la técnica de resolución de problemas y toma de decisiones de la Terapia Cognitivo Conductual, para ello necesitarás papel y bolígrafo.
Lo primero es definir el problema, puede que sean más de uno, el primero: "¿cuáles son mis objetivos de vida a nivel sentimental y familiar?", el segundo: "¿Cómo me gustaría que fuese mi pareja?" y por último, el tercero en función de los anteriores: "¿quiero continuar con esta relación que tengo actualmente?".
Para los dos primeros escribe las respuestas a modo de lista, sin más, añade tembién tus líneas rojas, es decir, lo que tengo claro que no quiero para mi vida, las cosas que no puedo tolerar en una relación bajo ningún concepto, y también aquellas cosas a las que no pienso renunciar. Para el tercero la cosa se complica, porque evidentemente esta persona no encajará perfectamente con lo que has contestado en los dos primeros. Lo que tienes que valorar es si esta persona te aporta lo suficiente de las dos primeras preguntas como para continuar con ella, o si por el contrario hay cuestiones a las que nunca te podrás acostumbrar como puede ser la diferencia de edad, quien sabe si bien reflexionado es una línea roja a la que nunca te vas a acostumbrar.
Es un ejercicio de reflexión profunda, toma de decisiones y madurez. Espero haberte aportado algo. Un saludo.
Añadiendo algo a lo que han dicho los compañeros desde una perspectiva cognitivo conductual: tienes un problema, pero tengo la sensación de que no lo puedes resolver porque faltan cosas por aclarar.
Puedes utilizar la técnica de resolución de problemas y toma de decisiones de la Terapia Cognitivo Conductual, para ello necesitarás papel y bolígrafo.
Lo primero es definir el problema, puede que sean más de uno, el primero: "¿cuáles son mis objetivos de vida a nivel sentimental y familiar?", el segundo: "¿Cómo me gustaría que fuese mi pareja?" y por último, el tercero en función de los anteriores: "¿quiero continuar con esta relación que tengo actualmente?".
Para los dos primeros escribe las respuestas a modo de lista, sin más, añade tembién tus líneas rojas, es decir, lo que tengo claro que no quiero para mi vida, las cosas que no puedo tolerar en una relación bajo ningún concepto, y también aquellas cosas a las que no pienso renunciar. Para el tercero la cosa se complica, porque evidentemente esta persona no encajará perfectamente con lo que has contestado en los dos primeros. Lo que tienes que valorar es si esta persona te aporta lo suficiente de las dos primeras preguntas como para continuar con ella, o si por el contrario hay cuestiones a las que nunca te podrás acostumbrar como puede ser la diferencia de edad, quien sabe si bien reflexionado es una línea roja a la que nunca te vas a acostumbrar.
Es un ejercicio de reflexión profunda, toma de decisiones y madurez. Espero haberte aportado algo. Un saludo.
Quizás te sea de gran ayuda reflexionar sobre varios temas. Por una parte, ¿por qué estas con él? ¿es porque te cuida y te lleva a sitios divertidos o realmente le quieres y te gusta estar con él por él mismo? Si la respuesta esta más cerca de lo primero ¿tienes suficiente con ese tipo de relación o necesitas algo más para ser feliz? ¿A qué se deben tus miedos, a ti o a él? Si crees que esta relación realmente te puede hacer feliz es necesario que cambies de actitud, te vendrían bien herramientas para superar tus miedos o tu inseguridad y aumentar tu autoestima.
Buenos días,
Hemos leído las aportaciones de nuestros cinco compañeros y quisiéramos complementar sus datos con una reflexión filosófica de orientación antropológica y personalista basada en el Modelo contextual de psicoterapia por si pudiese ayudar en la decisión que debe tomar.
Nos apoyaremos en las ideas de dos grandes intelectuales españoles. Pedro Laín Entralgo y José Ortega y Gasset, extraídas –respectivamente- de sus trabajos: “Salud y Perfección en el Hombre” y “Estética en el tranvía”.
Hemos osado a formular un preámbulo y una pregunta, en la confianza de que se ajuste a su demanda planteada:
“Tengo 29 años… y necesito ayuda… Llevo tres años saliendo con un hombre 17 años mayor que yo, y,… no soy feliz al cien por cien…No sé que me pasa y tengo ganas de llorar”
Pregunta: ¿Por qué tengo dudas sobre él?
Respuesta: Porque en su interior salud y perfección no se aproximan hasta casi identificarse (usted dice: “No soy feliz al cien por cien”)
Para ambos autores, hay casi identidad entre la “salud y la perfección” de la persona, porque estar sano es hacer lo que se debe hacer (salud y perfección se aproximan hasta casi identificarse).
Ortega propuso que uno de los orígenes del sufrimiento de las personas es precisamente no saber encontrar el verdadero sí mismo. La coincidencia de la vida con el proyecto personal produce una línea de existencia feliz o relativamente feliz. Cuando la vida es ampliamente inauténtica, la persona se dilacera, se escinde en dos: el que tenía que ser y el que resulta siendo. La dislocación se manifiesta en forma de dolor, de angustia, de enojo, de mal humor, de vació.
Pero además, la realización de la vida auténtica, hacer lo que uno debe hacer, llegar a ser lo que uno debe ser, es no solo saludable, sino que lleva a la perfección humana, es la perfección humana si se llega a realizar plenamente.
En cierta ocasión se pregunta Ortega por ¿qué es la belleza? ¿Cómo descubrimos la belleza en el rostro? ¿Por qué digo de un rostro que es bello?
Adivinamos que, entre el rostro bello del que no lo es, hay una sola diferencia. El rostro bello realiza precisamente su ideal, es lo que debe ser, mientras que en el que no es bello hay una escisión entre la realidad concreta y su ideal. El rostro individual es a la vez proyecto de sí mismo y su realización (de su ideal) más o menos completo.
Hay pues identidad, en las tesis de Ortega, sobre lo que es la belleza y lo que debe ser la vida. En ambos casos hay perfección cuando se cumple la ley. Si en vez de referirnos al rostro, nos referimos al interior, podemos hablar de un “interior bello” cuando realiza lo que debe hacer. Salud y perfección son pues conceptos casi idénticos.
Ayudar a la persona a encontrar su belleza interior, un peculiar modo de pedagogía, es la finalidad de la psicoterapia, si aplicamos fielmente la tesis de Ortega. Lo que hacía daño en la vida de la persona que sufre puede ir trabajosamente restaurándose hasta llegar a una forma personal sana y bella.
Espero y deseo, que estas reflexiones basadas en las tesis de Ortega y Laín puedan facilitar la toma de decisión.
Un saludo,
Juan José Regadera
Murcia
Hemos leído las aportaciones de nuestros cinco compañeros y quisiéramos complementar sus datos con una reflexión filosófica de orientación antropológica y personalista basada en el Modelo contextual de psicoterapia por si pudiese ayudar en la decisión que debe tomar.
Nos apoyaremos en las ideas de dos grandes intelectuales españoles. Pedro Laín Entralgo y José Ortega y Gasset, extraídas –respectivamente- de sus trabajos: “Salud y Perfección en el Hombre” y “Estética en el tranvía”.
Hemos osado a formular un preámbulo y una pregunta, en la confianza de que se ajuste a su demanda planteada:
“Tengo 29 años… y necesito ayuda… Llevo tres años saliendo con un hombre 17 años mayor que yo, y,… no soy feliz al cien por cien…No sé que me pasa y tengo ganas de llorar”
Pregunta: ¿Por qué tengo dudas sobre él?
Respuesta: Porque en su interior salud y perfección no se aproximan hasta casi identificarse (usted dice: “No soy feliz al cien por cien”)
Para ambos autores, hay casi identidad entre la “salud y la perfección” de la persona, porque estar sano es hacer lo que se debe hacer (salud y perfección se aproximan hasta casi identificarse).
Ortega propuso que uno de los orígenes del sufrimiento de las personas es precisamente no saber encontrar el verdadero sí mismo. La coincidencia de la vida con el proyecto personal produce una línea de existencia feliz o relativamente feliz. Cuando la vida es ampliamente inauténtica, la persona se dilacera, se escinde en dos: el que tenía que ser y el que resulta siendo. La dislocación se manifiesta en forma de dolor, de angustia, de enojo, de mal humor, de vació.
Pero además, la realización de la vida auténtica, hacer lo que uno debe hacer, llegar a ser lo que uno debe ser, es no solo saludable, sino que lleva a la perfección humana, es la perfección humana si se llega a realizar plenamente.
En cierta ocasión se pregunta Ortega por ¿qué es la belleza? ¿Cómo descubrimos la belleza en el rostro? ¿Por qué digo de un rostro que es bello?
Adivinamos que, entre el rostro bello del que no lo es, hay una sola diferencia. El rostro bello realiza precisamente su ideal, es lo que debe ser, mientras que en el que no es bello hay una escisión entre la realidad concreta y su ideal. El rostro individual es a la vez proyecto de sí mismo y su realización (de su ideal) más o menos completo.
Hay pues identidad, en las tesis de Ortega, sobre lo que es la belleza y lo que debe ser la vida. En ambos casos hay perfección cuando se cumple la ley. Si en vez de referirnos al rostro, nos referimos al interior, podemos hablar de un “interior bello” cuando realiza lo que debe hacer. Salud y perfección son pues conceptos casi idénticos.
Ayudar a la persona a encontrar su belleza interior, un peculiar modo de pedagogía, es la finalidad de la psicoterapia, si aplicamos fielmente la tesis de Ortega. Lo que hacía daño en la vida de la persona que sufre puede ir trabajosamente restaurándose hasta llegar a una forma personal sana y bella.
Espero y deseo, que estas reflexiones basadas en las tesis de Ortega y Laín puedan facilitar la toma de decisión.
Un saludo,
Juan José Regadera
Murcia
Hola... entiendo que estás muy angustiada, colapsada y dividida. Sin saber qué es lo que de verdad sientes. Por un lado, parece como si por fin hubieras experimentado el que alguien te ofrezca una presencia y un cariño que sientes que no has tenido en toda tu vida. Por otro, hay algo en ti que sabe que se avecina un futuro que no te gusta. Ese conflicto interno, tener que decidirte entre la pérdida del futuro que quieres y la pérdida de un amor y una seguridad que nunca has tenido antes, es una elección difícil. Algo así como estar enredada entre dos miedos que te hacen perderte a ti misma sin saber qué necesitas. Estás bloqueada porque elegir una de las dos decisiones implica pagar un precio. Quedarte sola y al descubierto o perder un futuro anhelado.
¡Hola! Coincido contigo en que sería muy beneficioso el que acudieras a un psicólogo, ya que tienes muchas dudas razonables, pero creo que tienes muchas palabras que se han atascado en varios miedos tuyos, pero me parece que es necesario que las puedas desahogar y escucharte a ti misma y así tener más claro qué es lo que quieres hacer o no.
Un saludo, Paul
Un saludo, Paul
Muchas gracias por la confianza que has depositado al contarnos una experiencia así.
Ante esta circunstancia hay que realizarse muchas preguntas, como por ejemplo ¿Qué espero de esta relación?, ¿Qué me aporta esa persona?, ¿Qué le estoy aportando yo?, ¿Me siento bien?, ¿Qué emociones y pensamientos aparecen?. Es necesario indagar en las emociones y sentimientos que aparecen relacionados con esta relación, y también preguntarnos qué es lo que queremos para un futuro.
Supone un análisis interno, un momento de reflexión y de diálogo que nos permita aclarar todas las dudas, y lo más importante, honrar todo lo que nos haga feliz.
Aquí también tenemos que trabajar en primer lugar el amor propio, el querernos a nosotras, y cuidarnos, para así, poder luego extrapolarlo a los demás.
Juntas podremos trabajar esas inseguridades, miedos y oscuridades que se pueden observar. No será nada fácil, pero sí muy sanador.
Un abrazo!
Ante esta circunstancia hay que realizarse muchas preguntas, como por ejemplo ¿Qué espero de esta relación?, ¿Qué me aporta esa persona?, ¿Qué le estoy aportando yo?, ¿Me siento bien?, ¿Qué emociones y pensamientos aparecen?. Es necesario indagar en las emociones y sentimientos que aparecen relacionados con esta relación, y también preguntarnos qué es lo que queremos para un futuro.
Supone un análisis interno, un momento de reflexión y de diálogo que nos permita aclarar todas las dudas, y lo más importante, honrar todo lo que nos haga feliz.
Aquí también tenemos que trabajar en primer lugar el amor propio, el querernos a nosotras, y cuidarnos, para así, poder luego extrapolarlo a los demás.
Juntas podremos trabajar esas inseguridades, miedos y oscuridades que se pueden observar. No será nada fácil, pero sí muy sanador.
Un abrazo!
Sería fundamental poder acudir a terapia para narrar todo lo que tienes dentro y aprender como gestionar las emociones y los miedos que van detrás.
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