Hola! Hace meses empecé a experimentar un nivel de ansiedad drástico el cual se juntó con una riniti

Buenas! Siento mucho que estés pasando por esta situación. Lo más probable es que estos episodios de ansiedad, ataques de pánico y claustrofobia que comentas estén relacionados y tengan un origen común. Lo ideal sería descubrir que situaciones estabas viviendo que pudieran ser las detonantes de la ansiedad que empezaste a sentir y que ha ido en aumento desde entonces. Trabajar con ese origen sería importante ya que si no vas a estar mitigando síntomas pero sin arreglar el núcleo del problema y por tanto, puede que siga apareciendo otra sintomatología en el futuro. Si actualmente estás en terapia y estás cómoda te recomiendo que sigas, aunque creo que 4 meses de evaluación es demasiado. Si por el contrario no te sientes cómoda o sientes que no has avanzado nada, quizá podrías probar con alguien diferente.
Los ejercicios respiratorios para controlar los niveles de ansiedad son muy eficaces aunque quizá en tu situación si es algo que te resultaría difícil o incómodo dado la rinitis seca que padeces.
Espero que tu situación mejore lo antes posible. Un saludo

Buenos días. En primer lugar gracias por exponer tu pregunta, ya que entiendo que no es una situación fácil. Coincido con el especialista que 4meses de evaluación son muchos, si no habéis comenzado a trabajar te recomiendo que hables con tu psicólog@ y le expongas esta inquietud. No obstante, si habéis comenzado a trabajar y no ves cambios podrías pensar en probar con un especialista que pueda aportar otro enfoque u otro tipo de técnicas que puedan adaptarse de una forma individual a tu caso. Espero haberte ayudado, si tienes alguna otra cuestión quedo a tu disposición. Un saludo

Bajo mi punto de vista, cuando pasa tanto tiempo y no se aprecien cambios, aunque a veces sea algo latoso, debe ser necesario cambiar de especialista. Esto no quiere decir que sea mal psicólogo ni muchísimo menos, pero quizás sea positivo un cambio.

Entiendo lo difícil que ha sido para ti enfrentar esta combinación de ansiedad y claustrofobia, especialmente después de los ataques de pánico que has experimentado. Como psicóloga experta en EMDR (Desensibilización y Reprocesamiento por Movimientos Oculares), puedo ofrecerte una perspectiva adicional sobre cómo abordar estas dificultades.

El EMDR es una terapia altamente efectiva para el tratamiento de traumas y trastornos de ansiedad, incluyendo el trastorno de estrés postraumático (TEPT). Se basa en la idea de que los síntomas psicológicos pueden estar relacionados con experiencias traumáticas no procesadas, y utiliza movimientos oculares o estimulación bilateral para ayudar al cerebro a procesar y digerir esas experiencias de manera más adaptativa.

Dado que has experimentado ataques de pánico en situaciones específicas, como en el autobús, el EMDR podría ser una opción útil para abordar las raíces de esos síntomas. Durante las sesiones de EMDR, trabajaríamos juntas para identificar los recuerdos traumáticos asociados con tus ataques de pánico y las sensaciones de ahogo, y luego utilizaríamos la estimulación bilateral para ayudar a tu cerebro a procesar esas experiencias de manera más completa.

El objetivo del EMDR no es solo reducir los síntomas, sino también cambiar la forma en que el cerebro procesa la información relacionada con el trauma, lo que puede llevar a una disminución sostenida de la ansiedad y una mayor sensación de control y bienestar.

Además del EMDR, seguir trabajando en técnicas de afrontamiento y manejo de la ansiedad, como la respiración profunda, la relajación muscular progresiva y la exposición gradual, puede complementar tu tratamiento y ayudarte a sentirte más capacitada para enfrentar las situaciones desafiantes.

Te animo a que continúes tu trabajo en terapia cognitivo-conductual y consideres discutir la posibilidad de integrar el EMDR en tu plan de tratamiento con tu terapeuta actual. Juntas, podemos trabajar para ayudarte a superar estos desafíos y recuperar tu calidad de vida.

Hola, La psicología ofrece tratamientos muy efectivos para tratar los síntomas que describes pero deben estar personalizados y tener presente otras cuestiones en cuenta como la edad, condición física, intensidad y frecuencia de los síntomas...La evaluación es un proceso continuo en la terapia pero a partir de la tercera o cuarta sesión, a veces antes, se pueden empezar a dar pautas como higiene del sueño, aplicación de técnicas de relajación (adaptadas) ...En definitiva, un programa de psicología bien aplicado a tu caso y siguiendo las pautas indicadas puede mejorar tu relación con los síntomas y hacer que desaparezcan

Es tremendo sentirse así, verdad? Es como si no pudiéramos gobernar nuestra cabeza ni nuestro cuerpo y todo se hace muy difícil.
La terapia lleva su tiempo. Confía en ti, confía en tu terapeuta. Todo eso lleva un tiempo.
Si sientes que vas más lenta de lo que quisieras, díselo a tu terapeuta.
Lo más importante de la terapia es la confianza y la buena alianza que establezcáis.
Mucha suerte

El ataque de pánico esta caracterizado por la aparición repentina de miedo o malestar intenso acompañado de sintomatología física y cognitiva. El estrés (físico, emocional, mental) suele ser el antecedente frecuente del primer ataque de pánico. Las repetidas situaciones de estrés van activando crónicamente al sistema nervioso.
Posterior al ataque, lo que se siente es un gran agotamiento psicofísico acompañado del temor de volver a sentirse mal (miedo al miedo) y al no encontrar una explicación válida a su aparición, lo que se piensa sobre las sensaciones de pánico toma un papel fundamental.
Se produce entonces un cambio en la conducta habitual de quien padece pánico. Cuando las crisis se repiten, la persona deja de actuar como antes, está hipervigilante, no descansa, pierde seguridad y comienza a evitar situaciones o lugares en los que tuvo síntomas de pánico. Cuando la asociación entre las sensaciones internas y la interpretación negativa se suma a determinadas situaciones externas se produce la agorafobia.
Podemos pensar el trastorno de pánico como una fobia a las sensaciones corporales, ya que lo que se teme son las propias sensaciones internas que se intensifican por la ansiedad y de esta manera tiende a autoproducirse. Luego del primer ataque se tiende a vivir en un estado de alerta constante lo que favorece que frente a la mínima sensación corporal aumente la posibilidad de una nueva crisis, ya que hay una interpretación catastrófica de dichas sensaciones.
El circuito del pánico se instala y mantiene a partir de los pensamientos catastróficos que surgen como respuesta a las sensaciones corporales. Por lo tanto, el papel de los pensamientos que surgen en ese momento son de suma importancia. El tratamiento se focaliza entonces en modificar estos errores de pensamiento. A esto lo llamamos “reestructuración cognitiva”, que es aprender a pensar de un modo diferente al que lo hacemos habitualmente cuando se empiezan a sentir los síntomas de pánico, intentar buscar un modo de pensar más funcional y mucho más adaptativo para esa situación. Los pensamientos automáticos distorsionados son aprendidos, y por lo tanto pueden desaprenderse.
El siguiente paso es la exposición a situaciones temidas de manera gradual.
Al igual que los anteriores profesionales, creo que en cuatro meses de terapia tendrías que haber notado progreso en tu recuperación. Pero si as conectado con tu terapeuta y te sientes cómoda, el proceso terapéutico de cada persona es diferente y el tiempo de recuperación, también.

Lamento mucho escuchar que estás pasando por esta experiencia tan desafiante. Como comenta una compañera más arriba el EMDR es muy buena opción aunque no la única, el EMDR se puede enfocar muy bien en los problemas de fobia.

Aquí te dejo algunas estrategias más que podrían ayudarte a enfrentar estas situaciones de manera más efectiva:

Técnicas de respiración: Practica técnicas de respiración profunda y relajación para ayudar a calmar tu sistema nervioso cuando te enfrentas a situaciones desencadenantes de ansiedad. La respiración abdominal profunda puede ayudarte a sentirte más tranquila y controlar los síntomas de asfixia.
Exposición gradual: Trabaja con tu terapeuta en un plan de exposición gradual a las situaciones que te causan ansiedad, como montar en autobús o tren. Comienza con situaciones menos estresantes y ve avanzando gradualmente a medida que te sientas más cómoda.
Práctica de la atención plena: La atención plena puede ayudarte a mantener la calma y la perspectiva en momentos de ansiedad. Practica la atención plena durante el día, enfocándote en el momento presente y aceptando tus pensamientos y sensaciones sin juzgarlos.
Reestructuración cognitiva: Identifica y cuestiona los pensamientos negativos y distorsionados que surgen durante las situaciones de ansiedad. Trabaja en reemplazar estos pensamientos con afirmaciones más realistas y positivas.
Apoyo social: Busca el apoyo de amigos, familiares o grupos de apoyo que puedan brindarte comprensión y aliento mientras trabajas en superar tus miedos.
Recuerda que superar la claustrofobia y la ansiedad asociada puede llevar tiempo y esfuerzo, pero con la ayuda adecuada y tu compromiso con el proceso terapéutico, es posible encontrar alivio y recuperar tu libertad para viajar con tranquilidad

Entiendo bien que estás pasando por una situación en tu vida, complicada y desagradable. Dado que estás siguiendo una terapia psicológica entiendo que debes seguir las pautas que te marque el profesional. Lo importante es confiar en la persona. Lo único que te puedo decir, si no lo has hecho ya, es que te centres en las causas del estrés (qué te ha llevado a encontrarte en esta situación) y no tanto en la sintomatología (claustrofobia). Un ejercicio, desde mi punto de vista, muy potente, es la línea de la vida. En ella colocas los acontecimientos que te han impactado (para bien o para mal) a lo largo de tu vida. El análisis de la misma (sentimientos que aparecen, etapas o capítulos que puedes detectar....) ayudan mucho. Por otro lado, no dejes de confiar en que poco a poco podrás encontrar una solución a lo que te ocurre. Un saludo;

Hola, buenas tardes;)

Entiendo lo difícil que debe ser para ti lidiar con esa ansiedad y la claustrofobia! Pero he de decirte que me parece fenomenal que estés acompañada por un especialista. Sin embargo, si me permites el consejo considero que quizás, una idea que podrías probar es la exposición gradual, enfrentarte poco a poco a las situaciones que te generan ansiedad, como montar en autobús o tren. Aunque esto deberías de consultarlo con tu terapeuta, al final, él o ella es la que esta llevando tu caso. Y recuerda, poco a poco pero con constancia, llegarás a encontrarte mejor. Si necesitas algo más ayuda, ya sabes donde estamos. Un abrazo!

Gracias por compartir tu caso. Espero que nuestros comentarios te sirvan de ayuda. Ante todo, hay que aclarar que no es justificable que, en terapia cognitiva conductual, se esté 4 meses solamente de evaluación. Posiblemente, ya tenías un comportamiento ansioso de mucho tiempo atrás, que no se disparó en forma de pánico y fobias hasta que te encontraste con crisis respiratoria derivada de la rinitis seca. Ese episodio te asustó enormemente y te impactó emocionalmente, sintiendo impotencia, que no tenías control sobre ello. Ese impacto de miedo a ahogarse se ha mantenido y se ha ido retroalimentado. Hay que frenarlo y reducirlo. Para ello se te deben proporcionar herramientas adecuadas a tu persona y situación. No es fácil, pero bien aconsejada, gradualmente lo puedes conseguir. Ánimos. recibe un fuerte abrazo.