He tenido muchas discusiones con mi novio en el transcurso de estos meses, pero siento que no es lo
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He tenido muchas discusiones con mi novio en el transcurso de estos meses, pero siento que no es lo mismo. Odio que tengamos discusiones porque siempre me hago esa idea de que nuestra relación no da para más y que no nos logramos comprender, pero cuando estamos bien, soy la persona más feliz del mundo. Hoy día también discutimos por una tontería y conversamos sobre lo que sucede. Yo le dije que odio discutir y que prefiero tener paz, a lo que él me respondió que en toda relación hay problemas y eso debía comprender; a lo que yo le respondí que odiaba eso y eso me hacía alejarme de él. Él me responde que él puede tolerar los problemas porque vive en ellos ya que es abogado, pero que yo debía esforzarme en entender que una pelea no nos define como pareja. Yo siento que soy una persona nociva que odia las discusiones, pero que cuando está en ellas, soy la persona más hiriente y negativa posible. Mi pareja me ha demostrado que realmente me ama y que se está esforzando; yo necesito aprender a sobrellevar las peleas y no dejar que me consuman mentalmente ¿Qué puedo hacer? ¿Debería dejar a mi pareja o puedo trabajar en mi problema estando con él?
Un buen punto de partida creo que sería indagar en los motivos de las peleas. Pueden ser cuestiones de variada índole. En ocasiones tienen que ver con actitudes o comportamientos de la pareja, pero muchas veces también "llevamos" asuntos o dificultades propias de la vida de cada uno a nuestra relación, y quien está a nuestro lado, por el hecho de compartir nuestra vida con él/ella, recibe esta hostilidad porque es quien está allí en ese momento. Otras veces, los desencuentros están efectivamente enraizados en diferencias de importancia entre los miembros de una pareja: valores, ideales, costumbres, etc. En resumen, sería bueno poder conocer tu caso más en detalle para poder orientarte mejor.
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Las discusiones y el conflicto es lo más normal en una relación vincular, lo que necesitamos es aprender herramientas de gestión y comunicación para poder abordar los temas desde la calma y reflexión y no dejarnos llevar por ataques personales.
Hola, cómo estás?
Respondiendo a tu pregunta, claro que puedes aprender a manejar las discusiones de una forma diferente estando en pareja. De hecho, es en las discusiones en la pareja cuando podemos poner en prácticas nuevos aprendizajes y herramientas para discutir de una forma sana y no dañina para la relación ni para ti misma. Digamos estar en pareja te permite tener esa práctica para abordar de forma diferentes esas discusiones que hasta ahora se estaban gestionando de una forma dañina.
También es importante analizar por qué estamos teniendo discusiones (estamos en periodo de estrés? atravesamos una mala racha porque estamos descuidando aspectos de la relación?), si hay discusiones sobre temas repetitivos que no se llegan a solucionar nunca, etc. A veces aunque tengamos muchas herramientas para enfrentar discusiones puede que necesitemos algo más para resolverlas. Un ejemplo podría ser cuando ninguno de los dos desea ceder o hacer cambios en algún aspecto que esté afectando a la relación.
Espero haberte sido de ayuda!
Respondiendo a tu pregunta, claro que puedes aprender a manejar las discusiones de una forma diferente estando en pareja. De hecho, es en las discusiones en la pareja cuando podemos poner en prácticas nuevos aprendizajes y herramientas para discutir de una forma sana y no dañina para la relación ni para ti misma. Digamos estar en pareja te permite tener esa práctica para abordar de forma diferentes esas discusiones que hasta ahora se estaban gestionando de una forma dañina.
También es importante analizar por qué estamos teniendo discusiones (estamos en periodo de estrés? atravesamos una mala racha porque estamos descuidando aspectos de la relación?), si hay discusiones sobre temas repetitivos que no se llegan a solucionar nunca, etc. A veces aunque tengamos muchas herramientas para enfrentar discusiones puede que necesitemos algo más para resolverlas. Un ejemplo podría ser cuando ninguno de los dos desea ceder o hacer cambios en algún aspecto que esté afectando a la relación.
Espero haberte sido de ayuda!
Es natural que las discusiones en una relación te generen incomodidad, especialmente si asocias los conflictos con la idea de que la relación podría terminar. Sin embargo, el hecho de que tu pareja esté dispuesto a trabajar en las diferencias y que ambos puedan hablar sobre lo que sienten es un signo positivo. Las discusiones, si se gestionan adecuadamente, no tienen por qué ser destructivas; de hecho, pueden ser una oportunidad para crecer juntos y fortalecer la relación.
El primer paso es dejar de percibir las discusiones como un fracaso y comenzar a verlas como un proceso normal en cualquier relación. Aprender a manejar estos conflictos de manera más saludable es clave. Podrías considerar trabajar en cómo comunicas tus emociones durante una discusión, evitando caer en un tono hiriente o negativo. Técnicas como la comunicación asertiva y la regulación emocional te ayudarán a expresar tus sentimientos sin que el conflicto te consuma.
Si sientes que esto es un patrón que te cuesta manejar sola, la terapia puede ser un espacio muy útil para explorar estas dinámicas. Tanto la terapia individual como la de pareja podrían ayudarte a desarrollar herramientas para gestionar mejor las discusiones, reducir la ansiedad que te generan y evitar que afecten la percepción que tienes de la relación. No es necesario que termines la relación si ambos están comprometidos en trabajar juntos; más bien, es una oportunidad para crecer como pareja y como individuo.
El primer paso es dejar de percibir las discusiones como un fracaso y comenzar a verlas como un proceso normal en cualquier relación. Aprender a manejar estos conflictos de manera más saludable es clave. Podrías considerar trabajar en cómo comunicas tus emociones durante una discusión, evitando caer en un tono hiriente o negativo. Técnicas como la comunicación asertiva y la regulación emocional te ayudarán a expresar tus sentimientos sin que el conflicto te consuma.
Si sientes que esto es un patrón que te cuesta manejar sola, la terapia puede ser un espacio muy útil para explorar estas dinámicas. Tanto la terapia individual como la de pareja podrían ayudarte a desarrollar herramientas para gestionar mejor las discusiones, reducir la ansiedad que te generan y evitar que afecten la percepción que tienes de la relación. No es necesario que termines la relación si ambos están comprometidos en trabajar juntos; más bien, es una oportunidad para crecer como pareja y como individuo.
Hola, gracias por la pregunta.
Faltaría información acerca de como son las discusiones (tono, vocabulario, distancia emocional entre vosotros cuando suceden, etc), pero discutir per se no es negativo. Las discusiones forman parte de una relación sana y normal, siempre que se tengan de una manera constructiva y se puedan cerrar adecuadamente.
Por lo que escribes, parece que discutir te conecta con una parte de ti que tu consideras nociva, hiriente y negativa. En terapia individual se podría trabajar sobre ello, analizando cual es su origen y como se manifiesta en tu vida, así como analizando de que maneras interfiere en vuestras discusiones. También sería interesante explorar tus expectativas entorno al tema (por ejemplo, la expectativa de que en una relación buena nunca hay discusiones, no es una expectativa ajustada a la realidad). Esto se puede trabajar independientemente de si estas en la relación o no, pues el trabajo a realizar es individual.
Si los problemas vienen más por como son vuestras discusiones (por ejemplo, si hubiera insultos, violencia, etc.) podría ser más adecuada la intervención de terapia de pareja.
Espero haber resuelto tus dudas, un saludo.
Faltaría información acerca de como son las discusiones (tono, vocabulario, distancia emocional entre vosotros cuando suceden, etc), pero discutir per se no es negativo. Las discusiones forman parte de una relación sana y normal, siempre que se tengan de una manera constructiva y se puedan cerrar adecuadamente.
Por lo que escribes, parece que discutir te conecta con una parte de ti que tu consideras nociva, hiriente y negativa. En terapia individual se podría trabajar sobre ello, analizando cual es su origen y como se manifiesta en tu vida, así como analizando de que maneras interfiere en vuestras discusiones. También sería interesante explorar tus expectativas entorno al tema (por ejemplo, la expectativa de que en una relación buena nunca hay discusiones, no es una expectativa ajustada a la realidad). Esto se puede trabajar independientemente de si estas en la relación o no, pues el trabajo a realizar es individual.
Si los problemas vienen más por como son vuestras discusiones (por ejemplo, si hubiera insultos, violencia, etc.) podría ser más adecuada la intervención de terapia de pareja.
Espero haber resuelto tus dudas, un saludo.
Entiendo que te encuentras en una situación difícil en tu relación y es normal que estés buscando ayuda para mejorar la situación. Parece que las discusiones están causando un gran impacto en ti y en tu percepción de la relación. Es importante recordar que en toda relación de pareja es normal tener diferencias y conflictos, lo importante es cómo se manejan y se resuelven esas situaciones.
Es importante que te des cuenta de que tienes la capacidad de cambiar la forma en que afrontas las discusiones en tu relación. Es importante que te des permiso para equivocarte y aprender de esas experiencias, sin juzgarte a ti misma.
Creo que también sería interesante que conectases contigo misma a un nivel más profundo para identificar las razones subyacentes detrás de tu aversión a las discusiones. Puede ser útil explorar tus creencias y patrones de pensamiento que están contribuyendo a tu reacción negativa ante los conflictos. Tus pensamientos y emociones tienen un impacto en la realidad que experimentas. Al cambiar tu enfoque hacia las discusiones y verlas como oportunidades de crecimiento y aprendizaje en lugar de amenazas a la relación, puedes comenzar a transformar la dinámica de tu relación (siempre y cuando sean constructivas y no un "ring de boxeo" donde atacar a un adversario).
En cuanto a tu pregunta sobre si deberías dejar a tu pareja o trabajar en tu problema estando con él, te recomendaría explorar primero la posibilidad de trabajar en ti misma y en tus habilidades de comunicación y manejo de conflictos. La terapia de pareja o la terapia individual pueden ser recursos útiles para ayudarte a abordar tus preocupaciones y mejorar la relación.
Es importante que te des cuenta de que tienes la capacidad de cambiar la forma en que afrontas las discusiones en tu relación. Es importante que te des permiso para equivocarte y aprender de esas experiencias, sin juzgarte a ti misma.
Creo que también sería interesante que conectases contigo misma a un nivel más profundo para identificar las razones subyacentes detrás de tu aversión a las discusiones. Puede ser útil explorar tus creencias y patrones de pensamiento que están contribuyendo a tu reacción negativa ante los conflictos. Tus pensamientos y emociones tienen un impacto en la realidad que experimentas. Al cambiar tu enfoque hacia las discusiones y verlas como oportunidades de crecimiento y aprendizaje en lugar de amenazas a la relación, puedes comenzar a transformar la dinámica de tu relación (siempre y cuando sean constructivas y no un "ring de boxeo" donde atacar a un adversario).
En cuanto a tu pregunta sobre si deberías dejar a tu pareja o trabajar en tu problema estando con él, te recomendaría explorar primero la posibilidad de trabajar en ti misma y en tus habilidades de comunicación y manejo de conflictos. La terapia de pareja o la terapia individual pueden ser recursos útiles para ayudarte a abordar tus preocupaciones y mejorar la relación.
Buenas tardes, primero intenta ver de donde nace esa necesidad de no tener conflictos, si en tu pasado ha habido alguna situación en la que los conflictos eran más que un conflicto o tras un conflicto habia consecuencias muy negativas. Puede que esto si es así te ha enseñado a no entrar en conflictos y que cuando los hay te pongas muy a la defensiva. Los conflictos y las conversaciones incómodas son necesarias tanto en las relaciones de pareja como en las relaciones en general
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