Desde pequeña, siempre me ha fascinado el mundo interior de las personas. Escuchar sus historias, entender sus emociones y descubrir cómo funciona la mente humana ha sido una curiosidad constante en mi vida, y esa pasión me ha llevado a donde estoy hoy.
Terminé la carrera de Psicología en la UAM en 2015 y, tras vivir fuera de España hasta 2019, decidí volver para continuar mis estudios en psicología y especializarme en adicciones. Actualmente, estoy terminando mi máster en Psicología General Sanitaria y me dedico al acompañamiento emocional.
Mi trabajo en sesión está basado en un enfoque integrador de trauma, entendiendo el trauma como esas heridas emocionales que no hemos podido procesar y que, de una forma u otra, siguen afectando nuestra vida cotidiana, sin saber cómo, ni por qué. Me apasiona acompañar a las personas a sanar esas heridas, dándoles espacio y voz. Tengo especial debilidad por temas relacionados con las dinámicas familiares y la infancia, el género y la sexualidad, siempre desde una perspectiva comunitaria, social y feminista.
Creo en la importancia de entender el bienestar individual en el contexto de las relaciones, la comunidad y el entorno social en el que vivimos. Por eso, mi enfoque comunitario y social se centra en reconocer cómo factores externos, como la cultura, las normas de género o las estructuras de poder, pueden afectar nuestra salud mental. Juntas, trabajaremos no solo en lo personal, sino también en cómo esos factores sociales influyen en tu vida.
En mis sesiones, busco crear un espacio seguro y de confianza, donde puedas ser tú misma, sin juicios, y con libertad para explorar lo que te preocupa. Mi objetivo es que te sientas acompañada en tu proceso para así llegar a un lugar más honesto contigo misma y con los demás, dando voz a aquello que nunca se ha podido nombrar.