Nombres alternativos: Prostatitis no bacteriana, Prostatitis abacteriana
La prostatodina es como se denomina al síndrome que sufren aquellos pacientes con molestias vagas en la región genital, pero en que no hay antecedentes de infección urinaria, los cultivos de la secreción prostática son negativos y no se encuentran células inflamatorias. En estos casos se ha pensado que los causantes de la inflamación de la próstata pueden ser algunos tipos de virus y hongos. Se cree también que el factor causante puede deberse a una entrada de orina y de sustancias tóxicas que en ella circulan, desde la vía urinaria hacia el tejido prostático, lo que explica un mecanismo auto inmune. En cuanto a síntomas y a la poca efectividad de los tratamientos, la prostatodina es similar a la prostatitis no bacteriana. Otro factor que influye en el desarrollo de esta enfermedad es el estrés, la ansiedad o incluso la depresión. Los pacientes sufren molestias en el periné, o dolor en pene, testículos, área perianal, escroto, etc. durante la micción o fuera de ella. Respecto a su tratamiento, se suelen prescribir medicamentos antiinflamatorios para aliviar el dolor, así como medicamentos alfabloqueadores, que permiten el relajamiento de la musculatura prostática y mejoran la liberación de sus secreciones. Otras medidas igualmente importantes son el control del estreñimiento, ejercicios que mejoran la circulación perineal (natación, caminar o correr), limitar la actividad sexual a una o dos veces por semana, baños de asiento con agua tibia, y evitar alimentos y bebidas irritantes en la dieta, incluyendo bebidas alcohólicas.
La prostatodina es como se denomina al síndrome que sufren aquellos pacientes con molestias vagas en la región genital, pero en que no hay antecedentes de infección urinaria, los cultivos de la secreción prostática son negativos y no se encuentran células inflamatorias. En estos casos se ha pensado que los causantes de la inflamación de la próstata pueden ser algunos tipos de virus y hongos. Se cree también que el factor causante puede deberse a una entrada de orina y de sustancias tóxicas que en ella circulan, desde la vía urinaria hacia el tejido prostático, lo que explica un mecanismo auto inmune. En cuanto a síntomas y a la poca efectividad de los tratamientos, la prostatodina es similar a la prostatitis no bacteriana. Otro factor que influye en el desarrollo de esta enfermedad es el estrés, la ansiedad o incluso la depresión. Los pacientes sufren molestias en el periné, o dolor en pene, testículos, área perianal, escroto, etc. durante la micción o fuera de ella. Respecto a su tratamiento, se suelen prescribir medicamentos antiinflamatorios para aliviar el dolor, así como medicamentos alfabloqueadores, que permiten el relajamiento de la musculatura prostática y mejoran la liberación de sus secreciones. Otras medidas igualmente importantes son el control del estreñimiento, ejercicios que mejoran la circulación perineal (natación, caminar o correr), limitar la actividad sexual a una o dos veces por semana, baños de asiento con agua tibia, y evitar alimentos y bebidas irritantes en la dieta, incluyendo bebidas alcohólicas.