La placenta previa es la inserción de la placenta en la parte baja del útero, es decir lejos de su lugar normal en el fondo uterino. Puede o no cubrir el orificio interno cervical. La consecuencia más importante es que produce un síndrome hemorrágico en el tercer trimestre o en el parto como consecuencia del despegamiento de la placenta. Hay factores asociados como la edad avanzada de la madre, cirugías previas (cesáreas) o un embarazo múltiple, que pueden favorecer la aparición de este estado y El tratamiento dependerá de la importancia del sangrado y de la edad gestacional y/o madurez fetal. Cuando el sangrado es muy abundante, con pronóstico de deterioro de la calidad de vida de la embarazada, por anemia aguda y shock, se deberá realizar una cesárea, sin importar la edad gestacional. Por otra parte, si i la hemorragia es moderada y no pone en peligro la salud materna, se debe lograr que el feto llegue a las 36 semanas de gestación para su mayor madurez, generalmente mediante el reposo en cama y la prohibición de mantenerse de pie durante largos periodos.