Las infecciones fúngicas del cuero cabelludo se conocen con el nombre de tiñas. Se caracterizan por presentar zonas de alopecia, en las cuales se sufre prurito intenso, úlceras, pústulas, costras, descamación e inflamación. Para evidenciar la presencia de hongos se emplea la observacón con luz de Wood. Ante esta infección se requiere tratamiento antifúngico via oral, complementado con una higiene adecuada de la zona.