El absceso amebiano del hígado o absceso hepático, es una acumulación de pus en el hígado causada por un parásito intestinal llamado Entamoeba histolytica, el mismo organismo que causa la amebiasis, una infección intestinal, que es transportado a través de la sangre desde los intestinos hasta el hígado. La enfermedad se disemina a través de la ingestión de quistes en aguas o alimentos contaminados con materia fecal, el uso de excrementos humanos como fertilizante o el contacto directo entre personas. Se trata de una infección presente a nivel mundial, pero es más común en las áreas tropicales donde hay situaciones de hacinamiento y malas condiciones sanitarias. Son factores de riesgo la desnutrición, el embarazo, edad avanzada, padecer cáncer, el uso de esteroides o el alcoholismo. Los pacientes pueden o no tener síntomas de infección intestinal. Los síntomas que se pueden presentar son: fiebre, dolor abdominal, malestar general, pérdida de apetito y peso, ictericia, dolor articular y diarrea. El tratamiento usual para un absceso hepático es un medicamento llamado metronidazol (Flagyl). Igualmente, medicamentos como la paromomicina, se deben tomar para eliminar la amebiasis intestinal para prevenir la recurrencia de la enfermedad. En raras ocasiones, es posible que sea necesario drenar el absceso para ayudar a aliviar algo del dolor abdominal.