Antonio Cervero Fernández-Castañón

Como señalan mis compañeros, el trastorno de estrés postraumático se produce cuando un sujeto es víctima de un suceso aversivo inusual, como un accidente, una agresión sexual, una catástrofe... donde generalmente la persona se enfrenta a la muerte, a un riesgo físico grave o percibe una amenaza a su integridad física o a la de otros.

Esto genera en la persona un importante grado de ansiedad, que se manifiesta en que la persona que lo padece revive de forma recurrente el suceso, pensando en él, teniendo las mismas sensaciones que tenía cuando lo vivió, teniendo pesadillas...

Los medicamentos que regulan los neurotransmisores pueden tardar algunas semanas en desplegar todos sus efectos, lo importante es mantener la adherencia al tratamiento.

Quizás le pueda ser útil combinar el tratamiento farmacológico con la psicoterapia.

Lo más recomendable una vez descartados los problemas médicos, es como señala la compañera que acuda a un psicólogo infantil. Personalmente creo que la orientación cognitivo - conductual es para este caso más acertada que el enfoque psicoanalítico.

El psicólogo valorará ante qué tipo de encopresis se encuentra y establecerá un tratamiento individualizado, ya que el tratamiento de la encopresis no está tan sistematizado como el de la enuresis (micción). En general, lo más habitual suele ser trabajar utilizando técnicas operantes (refuerzos positivos y negativos) combinándolas en una intervención con "economía de fichas".